SALTA (Redacción) – Durante este jueves, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, reconoció que la Ley de Alquileres fue un fracaso ya que no se consiguieron los resultados deseados y convocó a discutir una nueva ley que dé certezas a inquilinos como a propietarios. Quien salió a dar declaraciones radiales fue Juan Martín Biella, el presidente de la Cámara de Corredores Inmobiliarios.
Sobre esto, Juan Martín Biella expresó que es hora que reconozcan este «mamarracho», en referencia a la Ley de Alquileres, y también mostró su preocupación por las posibles modificaciones que se puedan llegar a hacer en un nuevo debate parlamentario. Una organización de inquilinos reconoció que un 60% de personas que alquilaban tuvieron que endeudarse para poder pagar el alquiler con la nueva legislación.
Detalló que «lo primero que tienen que hacer es sacar los puntos de litigio, cuanto menos riesgo la ley se optimiza, tienen que proteger al inquilino pero ojo esta ley tiene un articulado que el gobierno no lo puso en funcionamiento, que era lo único bueno, que es el Plan Nacional de Inquilinos, el Estado iba a salir a ayudarlos, no hizo nada. Eso es lo más importante que tenía esta ley», destacó Biella.
Además, criticó que con esta ley se actualizad cada 12 meses cuando el Estado hace una actualización bimestral o trimestral. En este sentido, Biella recomendó que «en un país con inflación, nosotros le pedimos a los legisladores que el ICL, el índice de actualización que querían instrumentar no lo hagan hasta que la inflación sea menor a dos dígitos». Precisó que los costos que quieren quitarle al alquiler termina duplicando el valor.
«Tiene que haber un pacto libre entre las partes, todo tiene que estar muy bien legislado porque no si no está aclarado da conflicto y si da conflicto, el alquiler sube. Esto es importantísimo, no puede un legislador dejar puntos abiertos para litigio porque sino realmente al propietario no le interesa», manifestó Biella. Finalmente, aclaró que el objetivo es bajar el riesgo y el nivel de conflicto. «Un punto de equilibrio es lo óptimo. Es lo que yo le pido a los legisladores, que tengan cuidado y que consulten mucho», concluyó.
