SALTA (Redacción) – Después de que desde la Municipalidad de Salta se iniciará una guerra terrible para sacar a los manteros del centro de la ciudad, estos se vieron obligados a asentarse en otros lugares mientras que también se habilitó el Mercado San Miguel en su subsuelo. De esta manera, ahora tienen un lugar fijo donde vender sus mercancías y una aparente mayor seguridad.
Al respecto, se le preguntó a estos manteros sobre su situación y qué piensan sobre el Mercado San Miguel. Allí pueden vender sus productos de 9 a 22 horas en horario corrido. Uno de los vendedores reveló que se siente «más tranquilo” y que ahora puede estar con su familia mientras trabaja. El hombre adelantó algunos precios que se pueden ver en su local, “remeras desde el talle S al XXXL a $600″.
Otras de las manteras que está en el Mercado ahora, comenzó relatando que «todo esto empezó el 6 de enero cuando nos llegó una notificación a Plaza Francia de que nos teníamos que ir el 8 de enero. Yo tuve la idea de venir a hablarlo al señor Pepe Muratore, al comienzo dijo que no», hasta que finalmente los escucharon: «y nos dijo que bueno, que en 20 días armábamos la feria. Teníamos que hacer una entrega para armar los puestos acá, en dos días lo juntamos, hoy estamos acá y don Pepe cumplió con su palabra«.
Continuó su relato, agradeciendo porque «gracias a Dios la gente esta entrando, más movimiento hay en el horario de la tarde. Acá mantenemos precio mantero». Asimismo, se expresó sobre sus colegas y dijo que «la mayoría son mamas solas, los chicos algunos están estudiando, quedaron solos con los hijos”, relató sobre la situación de otros manteros que corren por la misma suerte.
Mientras que otra de las manteras y que tiene un local fijo, recordó que había iniciado en «calle Belgrano con unas personas que se juntaban a hacer trueque, y comencé a ir más días, seguimos intercambiando y ya empezamos con plata. Nos sacaron de ahí, nos mandaron a la San Martín y nos eligieron a los que más estaban. Acá vamos a tener nuestro local, no tenemos que acarrear las cosas».