SALTA (Redacción) – Durante la jornada de ayer y después de muchas idas y vueltas se acordó la paritaria de los empleados municipales de Salta. No obstante, los gremios disidentes a la Unión de Trabajadores Municipales (UTM) se expresaron en contra del aumento salarial de 40%. Este se pagará de manera escalonada entre marzo y septiembre. Podría abrirse un nuevo foco de conflicto.
Mientras tanto desde la Municipalidad de Salta aseguran que la propuesta final y acordada es superadora a todas las demás. Pedro Serrudo, jefe sindical de UTM, oficializó ayer el aumento de salario para los empleados municipales de Salta. Este es el único sindicato con personería gremial que está capacitada para cerrar los acuerdos paritarios. El problema es que desde la Intergremial, que agrupa a otros 11 sindicatos, se mostraron disconforme con lo pactado.
César Molina de la Asociación de Empleados Municipales de Salta (ADEMUS) contó que habían hecho un conjunto de pedidos a Frida Fonseca. Puntualmente, reclamaron el aumento del básico y una suba para los porcentajes en los diferentes niveles del escalafón municipal. «Ellos dijeron que los niveles iban a subir a mil pesos por lo menos, y vemos que los compañeros vemos los niveles y no son más de $300», criticó.
Fonseca desmiente a los sindicatos
En este contexto, Frida Fonseca remarcó que el acuerdo fue con todos los sindicatos del sector. «El acuerdo paritario al que se ha llegado es sumamente superador está dentro de los planteos de cada uno de los sectores gremiales», manifestó la funcionaria municipal. Además, aseguró que «a todos los temas planteados se los tuvo en cuenta», desmintiendo a los gremios disidentes.
«Tengamos en cuenta que los 4000 pesos que se habían incrementado a través de bonos el año pasado quedaron fijados al básico en el mes de enero», aclaró. «Con este nuevo incremento no remunerativo ni bonificable en el básico también se mejora sensiblemente el básico» de los empleados municipales, resaltó Fonseca. Por último, concluyó explicando que «lo más fácil era decir un 45% para todo, aunque al que cobra menos le represente un aumento de 300 pesos en el sueldo y en este caso hemos querido priorizar con la intendenta que el que cobra menos también tenga un aumento importante».