Mientras que Woody Allen libra una multimillonaria batalla legal contra Amazon por haberse retirado de un acuerdo cinematográfico, el director de «Annie Hall» recibió una cálida bienvenida en Europa para su debut como director de ópera en Milan. Allen fue aplaudido en una conferencia de prensa, según señalaron las fuentes, antes de hacer la apertura de su producción musical en la comedia de Puccini, «Gianni Schicchi«. La muestra fue celebrada en la famosa casa de ópera La Scala. Tras el conflicto legal que involucra a Amazon, muchas celebridades de Hollywood decidieron distanciarse del cineasta.
«Recuerdo que cuando comencé a hacer películas… por la razón que sea, siempre tuve un público muy cálido y cariñoso en Europa», dijo el director de 83 años. «E incluso cuando mis películas no fueron tan bien recibidas en los Estados Unidos, siempre en Italia, Francia y Alemania, y en toda Europa, recibieron mis películas de muy buena forma». El afamado cineasta ha sido perseguido durante mucho tiempo por las acusaciones de abuso sexual que hiciera su hija Dylan Farrow, la cuales ha negado.
Por su parte, los reclamos ganaron fuerza gracias al movimiento #MeToo, tanto que Allen presentó una demanda de 68 millones de dólares contra Amazon por supuestamente haberse retirado de un acuerdo de cuatro películas debido a la controversia generada por el caso. En una declaración, la cadena de transmisión expresó que Allen se «saboteaba» a sí mismo. Junto con la ópera de La Scala, un museo de Milán estará lanzando una retrospectiva de la filmografía de Allen. El cantante de ópera Plácido Domingo fue quien animó a Allen dirigir la ópera, según las fuentes.
Por su parte, Amazon Studios devolvió el golpe Allen por su demanda $ 68 millones, afirmando que en los documentos judiciales la medida era justificada puesto que Allen terminó empañando el éxito de sus películas tras los controversiales comentarios hechos por el movimiento #MeToo movimiento en relación acusaciones de agresión sexual en su contra. El estudio archivó documentos en el tribunal federal de Manhattan para desestimar los reclamos de la demanda de Allen por incumplimiento de contrato.
En la declaración, Amazon culpó abiertamente a Allen por hacer una serie de comentarios públicos a raíz de las reclamos de conducta sexual proferidas contra el productor de cine Harvey Weinstein, los cuales sugirieron que el director no sería capaz de responsabilizarse por la gravedad de los problemas en virtud de proteger su propia carrera. Tales comentarios terminaron empañando su imagen dentro de la escena profesional de la industrial del entretenimiento hollywoodense.
«Allen expresó simpatía por Weinstein así como por sus víctimas, describiendo la situación como una situación muy triste para todos los involucrados'», se lee en los documentos del tribunal. «Luego Allen agregó: ‘No queremos pasar de una atmósfera de cacería de brujas, a una atmósfera de Salem, donde cada persona que haga un guiño a una mujer en una oficina de repente tenga que llamar a un abogado para ser defendido por su acción».
El estudio agregó que luego de que Dylan renovara sus acusaciones hacia Allen, señalando que la molestaba cuando solo era una niña, el cineasta desestimó públicamente las declaraciones explicando que Dylan solo lo hacia para llamar la atención. «Las declaraciones de Allen se produjeron justo cuando Amazon y Allen se preparaban para promover la película de ‘Wonder Wheel’, los cuales efectivamente sabotearon sus esfuerzos», afirma Amazon. “La respuesta de la industria cinematográfica fue rápida y condenatoria. Decenas de actores y actrices expresaron un profundo pesar por haber trabajado con Allen en el pasado, y muchos declararon públicamente que nunca más lo harían en el futuro».
