SALTA (Redacción) – De cara a los festejos por fin de año, la institución policial incrementó los operativos de controles en toda la provincia. En este marco, las drogas en Salta fueron unos de las principales protagonistas, ya que se concretaron varias detenciones y demoras por esta problemática. La más reciente tuvo lugar en Orán, donde se incautaron más de 8 mil dosis de cocaína.
Dicho procedimiento se llevó a cabo en el marco del Operativo Fin de Año, durante un control vehicular en el acceso a la ciudad de Oran. Según fuentes policiales, la droga fue descubierta por la perra antinarcóticos «Gringa», entre las pertenencias de dos pasajeros que viajaban en un remís. La Policía pudo estimar que el cargamento ilegal descubierto está valuado en aproximadamente $1.700.000.
Todo este operativo tuvo lugar en ruta nacional 50, a un 1 km del acceso sur a la ciudad de San Ramón de la Nueva Oran. Allí, personal de la División Investigaciones Complejas contra la Narcocriminalidad desarrollaba un control vehicular de rutina, cuando detectó a dos pasajeros de un remís con varios envoltorios sospechosos, tipo ladrillos.
Ante ello, comenzaron a requisar el vehículo y a los protagonistas. Al abrir los ladrillos, y con la colaboración del «can» antinarcóticos, descubrieron que se trataba de cocaína, lista para su comercialización. Mediante las pruebas correspondientes, dieron con que la sustancia arrojó un peso de 2.150 gramos equivalentes a 8.600 dosis valuada en aproximadamente 1.720.000 de pesos.
Más operativos
Días anteriores, mediante otros operativos, descubrieron más casos de drogas en Salta. Durante el día de ayer, también aprehendieron a un hombre con 28 dosis de marihuana. En este procedimiento participaron efectivos pertenecientes al Grupo de Intervención Conjunta y se desarrolló en Villa Soledad. Allí, tres hombres se dieron a la fuga cuando vieron a los policías, pero fueron interceptados. Luego de revisarlos, descubrieron envoltorios con la sustancia vegetal disecada, los cuales quedaron a disposición de la UFINAR.
