Casey Affleck, quien ha sido acusado de acoso sexual en el pasado, expresó en una reciente entrevista que decidió mantener en silencio durante el apogeo del movimiento #MeToo para evitar generar polémica en torno a sus acusaciones, a pesar de brindar su apoyo a la causa. “¿Quién no apoyaría el movimiento #MeToo? ¿Esa es una idea que está ahí afuera? Que hay algunas personas que dicen: ‘No creemos en la igualdad. Creemos que el lugar de trabajo debería ser un lugar peligroso para ciertas personas y no para otras’. Eso es absurdo», dijo en el podcast» Armchair Expert» de Dax Shepard.
«Sin embargo es muy, muy difícil hablar, y me da miedo ese tipo de confrontación», dijo el ganador del Oscar de 43 años. “Principalmente porque los valores del movimiento #MeToo son valores que están en el corazón de mi ser; están integrados en mi propio sistema de valores, tal y como me criaron». El actor también reveló que fue criado para ser respetuoso con las mujeres, al punto que no se le permitió ver la película «Dukes of Hazzard» cuando era niño porque sus padres consideraban que tenía un enfoque «sexista».
Las acusaciones
El actor de «Manchester By the Sea» lamentó durante la ocasión que su reputación se haya visto empañada por acusaciones de acoso en su contra, y señaló que cree que son «antitéticas» frente a lo que sería su verdadera personalidad. La productora Amanda White demandó a Affleck por 2 millones de dólares, alegando que Affleck hizo «avances no deseados» hacia ella mientras trabajaba en el documental «I’m Still Here: The Lost Year of Joaquin Phoenix». La productora también acusó a Affleck de usar su habitación para tener relaciones sexuales con otras mujeres y de enviarle mensajes «abusivos» luego de negarse a compartir la habitación de hotel con él.
Por otra parte, una cinematógrafa perteneciente al mismo proyecto, Magdalena Gorka, demandó a Affleck por 2.25 millones de dólares en una demanda separada. Gorka alegó que Affleck entró en su cama y la tocándola sexualmente sin su consentimiento mientras dormía. La mujer renunció a la película y acusó a Affleck de amenazarla con retener tanto su crédito en el proyecto como su pago posterior. «La forma en que algunas personas me han definido recientemente ha sido antitética con respecto a quién lo cual ha sido frustrante», dijo. «Y no haber podido hablar de eso ha sido difícil porque apoyo al movimiento, pero sentí que era mejor permanecer tranquilo».
El arrepentimiento
Anteriormente el actor dijo sobre las acusaciones: «Me arrepiento de haber estado involucrado en un conflicto que resultó en una demanda. Desearía haber encontrado una manera diferente de resolver las cosas. Nunca había tenido quejas como esa sobre mí y fue realmente vergonzoso. No supe cómo manejar la forma en que me describieron y las cosas que dijeron sobre mi. Traté de dejarlo atrás para seguir adelante con nuestras vidas, lo cual creo que merecee. Solo quise respetarlos como ellos me han respetado a mí y a mi privacidad. Y eso es todo».
Affleck también agregó que la era posterior a #MeToo le enseñó mucho sobre sus relaciones. «Me moví a un punto de vista más maduro, tratando de encontrar mi propia culpabilidad. Y una vez que lo hice, descubrí que había mucho que aprender», dijo el actor. «Yo era un jefe. Fui uno de los productores en el set de filmación… El elenco era el equipo y el equipo era una especie de elenco, era un ambiente poco profesional. No había dinero y tuve que asumir el papel de productor, y me parece que eso fue un error».
La disculpa pública
Continuó diciendo: «Contribuí a ese ambiente no profesional y toleré ese tipo de comportamiento de otras personas y desearía no haberlo hecho. Lamento mucho esa situación. Realmente no sabía de qué era responsable como jefe. Ni siquiera sé si me consideraba el jefe en ese momento. Pero me comporté de una manera y permití que otros se comportaran de una manera que no era profesional. Y lo siento».