SALTA (Redacción) – En el marco de su visita a México, el presidente Alberto Fernández hizo referencia a lo sucedido con el «vacunatario VIP«. Desde que todo salió a la luz, los nombres de muchos funcionarios que recibieron la vacuna, quedaron en evidencia. A pesar de reconocer que se trató de una «falta grave», calificó de «payasada» algunas denuncias.
«Detesto los privilegios; no los ejerzo ni me valgo de ellos; no soporto que eso ocurra», aseveró el mandatario en una conferencia de prensa. Durante esta transmisión algunos periodistas le preguntaron sobre las irregularidades en el operativo de inmunización en Argentina. Con respecto a ello, el jefe de Estado aseveró: «Leí que hicieron una denuncia; el hecho es lo suficientemente grave como para que un ministro de la talla de Ginés González García haya debido dejar su cargo, pero terminemos con la payasada».
Para continuar, remarcó que en nuestro país «no hay ningún tipo penal que diga será castigado el que vacune a otro que se adelantó en la fila». «No existe ese delito y no se pueden construir delitos graciosamente», apuntó. Alberto Fernández aprovechó esa pregunta para arremeter contra Mauricio Macri y sostuvo que «hay muchos delitos para investigar». Puso de ejemplo el negocio de los peajes y el endeudamiento, al cual lo calificó como un «negocio para el poder».
En cuanto a los funcionarios vacunados, declaró que le parece «razonable» que el senador Jorge Taiana, el diputado Eduardo Valdés, y el ministro de Economía Martín Guzmán lo hayan hecho, ya que tienen que representar a la Argentina en el exterior. No obstante, cabe aclarar que Taiana y Valdés no formaron parte finalmente de la comitiva que viajó.
La vacunación de Fernández
Durante la conferencia de prensa también le preguntaron sobre su vacunación y el porqué de la misma. Ante ello, Alberto Fernández recordó que en esa época, la Sputnik V era una vacuna bastante cuestionada por los medios. Por este motivo, decidió vacunarse como una forma de «convocar a la confianza ciudadana». Lo mismo pasó con la vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner y el gobernador Axel Kicillof.