SALTA (Redacción) – Rosario de Lerma atraviesa por una contexto político complicado. Luego de semanas de analizar la situación, el Concejo Deliberante aprobó por unanimidad someter a juicio político al intendente de esa localidad, Enrique Martínez. Sobre esto habló la concejal opositora, Griselda Galleguillos, quien sostuvo que hubo una gran cantidad de irregularidades durante el mandato del jefe comunal.
Mediante una entrevista radial, la funcionaria explicó que el intendente autorizó el reemplazo de las autoridades del Concejo Deliberante y avaló que ese cuerpo funcione en minoría. También se negó a rendir cuentas respecto a los fondos para la realización de los corsos, entre otras irregularidades. Desde el oficialismo, señalan que se trata de una estrategia con sentido electoral, ya que los comicios están cercas.
Sin embargo, Griselda Galleguillos negó esto, ya que Enrique Martínez no se postulará como intendente para las elecciones de julio. Por el contrario, aseguró que la decisión se tomó para cumplir con la obligación de los concejales de controla al Ejecutivo Municipal. La concejal explicó que no es el único caso de corrupción en Rosario de Lerma. Puso de ejemplo a Ignacio Jarsún, quien dejó la intendencia sin hacer una rendición de una cifra superior a los 170 millones de pesos.
El caso de Sergio Ramos
Otro reconocido caso de corrupción incluye al exintendente Sergio Ramos, a quien se lo acusa de desvíos de fondos. La fiscal penal, Verónica Simesen de Bielke, requirió que se eleve la causa a juicio político. Se trata de un monto de $341.715, los cuales se liquidaron al Municipio a través de la cuenta corriente bancaria que posee en el Banco Macro.
Esta transacción se llevó a cabo mediante dos acreditaciones: una del 26 de agosto de 2013 por el monto de $ 250.715 y otra del 13 de noviembre del mismo año por la suma de $91.000. Respecto a este tema, el MPF indicó que ese dinero tenía como fin la construcción de casas prefabricadas. El entonces intendente se había comprometido con Rosario de Lerma a efectivizar el espacio físico y la mano de obra, pero nunca se concretó.