SALTA (Gladys Coviello) – Las calas pertenecen a la familia araceaes. El nombre científico es Zantedeschia Aethiopica. Lleva el nombre en honor a Giovanni Zantedeschi, un médico cirujano italiano del siglo XIX, que estudió y plasmó sus conocimientos de la flora de la provincia de Brescia, Italia, en diez libros. El epíteto nos remite a Etiopía una región ubicada en el continente africano.
La palabra cala es de origen griego y está relacionada con los significados de belleza, pureza, compasión y simpatía. Estas flores fueron usadas en épocas de griegos y romanos. Por la forma de la flor similar a una copa para beber es símbolo e ícono de fiestas.
Observo las pinturas de Diego Rivera un enamorado de las calas pues considera que ellas están ligadas a la naturaleza y cultura indígena del mexicanismo ancestral. Pinta mujeres agobiadas por el peso de enormes ramos de calas, de espaldas mirando a ellas o abrazándolas en algunas obras, pero la más sugestiva es la imagen de una niña de ojos enormes y soñadores. En estos cuadros Diego Rivera intenta dar a México la identidad robada por los españoles.
La cala es una planta herbácea perenne de 60cm a un metro de altura. Posee rizomas oblongos gruesos con raíces hasta 15 cm de largo. Las hojas basales son grandes, de color verde oscuro y brillante. Las calas son parientes de los filodendros y las orejas de elefante.
Las flores pequeñísimas se ubican en un eje carnoso de 4 a 18 cm rodeado por una espata que se confunde con el pétalo blanco.
Las calas son tóxicas. El contacto con sus partes irrita labios, piel y mucosa bucal. En casos extremos produce gastroenteritis y diarrea. Ciertos aborígenes untaban sus flechas con venenos preparados con estas plantas.
Las calas son semi acuáticas, caducifolias o perennes, les gusta la humedad y viven en climas cálidos y tropicales. Abundan en zonas pantanosas. También se las conoce como lirios de agua y alcatraces.
Las modas producen variantes en los significados. Así, la cala que era símbolo de homenaje a los muertos y asociadas los cementerios, actualmente ha pasado ser alegoría de distinción y regocijo. Hoy se considera a la cala como símbolo de amor duradero y verdadero y con ellas se engalanan las iglesias para los casamientos.
Se usan como ornamentales para embellecer jardines. Se ubican en matas compactas donde la sombra y la humedad les darán esplendor.
La flor es símbolo de la nación de Irlanda del Norte y está relacionada con los sentimientos revolucionarios mexicanos. Una leyenda de México narra acerca del amor frustrado de una niña con un joven revolucionario quien, antes de partir a la guerra, le regaló una planta florecida y le pidió que la cuidara hasta su regreso. El padre, un rico hacendado, la casó con otra persona. Al salir de la ceremonia, su enamorado que regresó, la esperó en la puerta y recibió un ramo de las flores que ella cuidó aguardándolo. La flor cobra el significado de fidelidad y amor.
Gladys Coviello