Taylor Swift se volvió muy sincera en su nuevo documental, Miss Americana. El documental biográfico se estrenó durante la gala de apertura en el Festival de Cine de Sundance de este año en Park City, Utah, y los fanáticos pudieron ver un lado diferente y más vulnerable a Swift de lo que jamás hayan visto antes. Desde el catalizador de su reciente activismo político abierto hasta su lucha de años con un trastorno alimentario y problemas de imagen corporal.
Poco después del estreno de la película en Sundance, Variety publicó su reveladora entrevista con Swift, donde habló en detalle sobre los desafíos que enfrentó, como se ve en la nueva película, con respecto a sus luchas con sus problemas de imagen corporal. En la película, Swift explica: «No es bueno para mí ver fotos mías todos los días», dijo la cantante, señalando que a veces una foto de sí misma, o un comentario irreflexivo en la prensa simplemente la altera emocional y físicamente.
En una sincera entrevista
Hablando con la revista Variety, Swift admitió: «No sabía si me iba a sentir cómoda hablando de la imagen corporal o hablando de las cosas por las que he pasado en términos de salud», agregó. Sin embargo, fue la directora de la película, Lana Wilson, la hábil mano en la narración de las historias lo que hizo que Swift se sintiera más cómoda. «No soy tan articulada como debería ser sobre este tema porque hay muchas personas que podrían hablar sobre él de una mejor manera. Pero todo lo que sé es mi propia experiencia», explicó Swift.
«Y mi relación con la comida era exactamente la misma psicología que aplicaba a todo lo demás en mi vida: si me daban una palmada en la cabeza, lo registraba como bueno. Si recibía un castigo, lo registraba como malo», expresó. «Para Swift, una de las primeras cosas que recuerda haber registrado en su mente como «un castigo» fue cuando apareció una foto en un tabloide con el titular ‘¿Embarazada a los 18 años?’ Y fue porque había usado algo que hacia ver abultado mi estómago, agregó.
¿Premio o castigo?
En el extremo opuesto del espectro, Swift recordó cómo ella «entró en una sesión de fotos y en el vestuario alguien que trabajara en una revista dijo: ‘Oh, wow, esto es tan increíble puedes encajar los tamaños de muestra. Por lo general, tenemos que hacer modificaciones a los vestidos… Y lo vi como una palmada en la cabeza», explicó Swift. «Lo registras suficientes veces, y comienzas a acomodar todo hacia la alabanza y el castigo, incluido tu propio cuerpo».
