SALTA (Redacción) – La provincia de Formosa definirá gobernador el próximo domingo, junto a diputados provinciales, intendentes, concejales y senadores nacionales. La elección presentará como principales candidatos al actual mandatario provincial, Gildo Insfrán; y el elegido por Cambiemos, Adrián Bogado.
El primer postulante pertenece al Frente Para La Victoria, gobierna Formosa desde hace 24 años y buscará su séptimo mandato consecutivo. Fue uno de los encargados de aprobar la reelección indefinida en 2003 a través de la reforma de la Constitución Provincial. Además, en las últimas elecciones del 2015 para mandatario provincial cosechó el 73%.
Por el otro frente estará el peronista elegido por Cambiemos y candidato desde el Frente Amplio Progresista, Bogado. A través de las urnas intentará emular a su padre, Floro Bogado, quien gobernó Formosa entre 1983 y 1987; y se convirtió en el primer mandatario provincia desde el regreso de la democracia.
Uno de los factores importantes a tener en cuenta en los comicios provinciales es la vigencia de la Ley de Lemas, que replica las boletas electorales. Ante esto, la Justicia Electoral registró más de 80 sublemas, de las cuales 54 pertenecen al oficialismo, 13 a Cambiemos y el resto se reparten entre partidos vecinales.
En las elecciones provinciales de Formosa se estima que habrá un total de 443.275 electores habilitados a votar, 1.373 mesas disponibles y 210 centros de votación. Además, en esta oportunidad se incorporarán al padrón local 8.159 jóvenes de entre 16 y 18 años, según pudo confirmar la Cámara Electoral Provincial.
Llamativos métodos de campaña
En las diversas campañas realizadas previamente a la elección del próximo domingo fueron noticia y llamaron la atención los excéntricos recursos utilizados para captar votos por parte de los candidatos. Entre los que se destacan: el reparto de ropa interior, disfraces y sorteos de vehículos propios.
Otro episodio que resultó llamativo fue el realizado por el intendente capitalino, José Jofré, quien realizó la entrega de boletas acompañados de un militante disfrazado como Freddy Krueger. El intimidante método se utiliza en esquinas de la ciudad, comercios, barrios y es furor en las redes sociales.