SALTA (Redacción) – El exministro de Salud de Tucumán, Pablo Yedlin, habló acerca de la derogación del protocolo de Interrupción Legal del Embarazo y explicó que la actualización «no es una ley en sí», sino que busca hacer «modificaciones progresivas» en su implementación. “Lo que actualizó este protocolo es lo que se regla en el nuevo Código Civil”, detalló sobre la medida del renunciante secretario de Salud, Adolfo Rubinstein.
«No me ha llamado para ser parte del nuevo Gobierno»
Por otro lado, cabe mencionar que el diputado nacional tiene muy buena relación con el presidente electo, Alberto Fernández, y en su presencia al programa Intratables le consultaron acerca del papel que tendrá luego del 10 de diciembre. “No me ha llamado para ser parte del nuevo Gobierno, sí trabajamos con un equipo de salud con Ginés Gonzáles García, Arnaldo Medina y otros compañeros sanitaristas”, reveló quien podría ocupar el lugar que acaba de dejar Rubinstein esta mañana.
Tras la cuestión política, el legislador tucumano insistió sobre la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo: “Voté a favor de la despenalización del aborto, es otro tema, pero también es una necesidad. Los países que se autorizó, los abortos se redujeron. No podemos condenar a las mujeres a la muerte». «Uruguay logró que la muerte materna sea cero”, comparó el exministro de Salud de Tucumán.
«Las situaciones son absolutamente críticas»
Desde la postura de Yedlin el tratamiento del proyecto de Ley del aborto que se llevó adelante durante la gestión de Mauricio Macri debería haber tenido «más consenso». “No podemos forzar una ley que la mitad del país esté en contra. Hay que entender las diferencias sin avasallar la voluntad del otro”, criticó el diputado, considerando que la discusión todavía sigue abierta.
Por último, se refirió a la legislación de Tucumán y explicó que con el gobernador Juan Manzur tiene una buena relación y sabe de su gran convicción religiosa. Cabe mencionar que allí no se despenalizó el aborto, pero Yedlin pidió que se debe avanzar rápidamente. “Las situaciones son absolutamente críticas». «Si fuera Ministro de Salud, creo que el protocolo es necesario para actualizar la normativa. No creo en los antiderechos, ni que se quiera matar a nadie. Hay que lograr marcos de consensos”, concluyó.