SALTA (Redacción) – Las medidas que había tomado el Gobierno nacional para cerrar los registros para las exportaciones de maíz generaron un conflicto con varios sectores del campo. Esto motivó que desde el lunes rigiera un paro del campo de 72 horas para manifestarse contra la medida, a pesar que desde el Estado se había flexibilizado la restricción. Considerando el panorama, eso, este martes, el Poder Ejecutivo decidió dejar las medidas sin efecto.
El Gobierno nacional y entidades de la cadena agroindustrial arribaron a un acuerdo para dejar sin efecto todas las restricciones para exportar maíz, según consignó Agencia NA. De esta manera, ya no regirá el cese a la comercialización que se había dispuesto desde la Mesa de Enlace. Esta decisión se negoció en un encuentro que encabezó el ministro de Agricultura, Luis Basterra.
Reuniones claves y posturas cruzadas
Tras la reunión de este martes, el Ministerio de Agricultura procederá a levantar la limitación de las 30 mil toneladas. Sin embargo, se trabajará con un criterio de monitoreo de los registros de campaña vieja del 2019 y 2020. Cabe señalar que el Gobierno había avanzado con estas restricciones con el objetivo de garantizar el abastecimiento del mercado interno en los meses de verano, cuando el cereal escasea.
Frente a las presiones del campo por el cierre de las exportaciones, el Gobierno había flexibilizado la medida, y ampliado el límite a las 30 mil toneladas. Luis Basterra se había reunido, este lunes, con representantes del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA). Tras el encuentro, se mostró conforme con el «diálogo continuo y el trabajo virtuoso» con el campo. De hecho, en aquel momeno señaló que se lograron atender los «diversos intereses sectoriales sin desatender los sociales».
Sin embargo, varios sectores del campo persistían en su disconformidad pese a la flexibilización. Por eso, los presidente de las Confederaciones Rurales (CRA) habían ratificado, el lunes, que el paro de tres días seguiría en pie. Tal y como indico El Intransigente, Daniel Pelegrina, presidente de la Sociedad Rural, había explicado que la medida del Gobierno era un «error». Para el mismo no se trataba de una reapertura ya que el «cese de comercialización» seguiría igual.
