SALTA (Redacción) – Del «no hay plata» a la paralización absoluta de la obra pública, son parte de las medidas radicales que toma actualmente el presidente Javier Milei. Esto repercute directamente en las empresas constructoras que advierten que corren peligro los puestos de trabajo de muchos empleados.
A lo largo y ancho del país son 1.400 empresas que se ven afectadas por la paralización de la obra pública. Por eso es que el presidente de la Cámara de Construcción Argentina en Salta, Juan Miguel Guiñez; dio a conocer su preocupación por la situación en general. El recorte de fondos de Nación a las provincias podría traducirse en masivos despidos en el sector.
Desde la Cámara Empresarial responsabilizan al propio Gobierno nacional por los recortes financieros destinados a la obra pública. Todo esto terminó generando grandes demoras en la actualización de contratos junto. A esto se suma el retraso en la firma de certificados y la designación de funcionarios desde el inicio de la nueva administración. Eso ya implicó que se despida a 4.000 trabajadores en Salta.
¿De cuánto es el recorte en la provincia?
Por consiguiente, y teniendo en cuenta información del Gobierno de la Provincia, el recorte presupuestario asciende a los $10.000 millones. Es decir, la paralización de la obra pública puso en jaque al empleo en el sector y en muchos lugares, únicamente están los serenos custodiando la obra. Guiñez sostuvo que la falta de diálogo en Nación explica en buena parte esta problemática.
No hay que olvidar que Guillermo Ferraro, exministro de Infraestructura, fue despedido por supuesta filtración de información a la prensa. Con su salida las empresas perdieron la cadena de diálogo e interacción, lo cual los deja en una situación adversa para sostener la obra pública y aquellos trabajos ya iniciados. Un cálculo estimado indica que aproximadamente 1.400 empresas se ven afectadas por estos recortes.
