La bellísima Blake Lively (31) anunció oficialmente que está esperando su su tercer hijo durante la avant premiere de «Detective Pikachu», la cinta de realidad animada, que tuvo lugar el jueves por la noche en Nueva York. Irrumpió en la alfombra roja de la ceremonia con un impactante vestido amarillo que dejaba entrever su avanzado estado de gravidez. Junto a su esposo, el no menos exitoso Ryan Reynolds, fueron el foco predilecto de los distintos medios de comunicación que se dieron cita en el evento. Recordemos que el actor es la voz del protagonista animado de la película.
La pareja contrajo matrimonio en el 2012 y tienen dos hijos juntos, un varón de 4 años llamado James y una nena de 2 llamada Inez. Ryan Reynolds y Blake Lively se han hecho merecedores del sitial que han dejado vacantes Angelina Jolie y Brad Pitt tras su separación y divorcio, aunque se diferencian notablemente de «Brangelina» en la forma de abordar y entender el manejo de la fama. Es que la nueva pareja estrella de Hollywood hace un culto de la protección de la intimidad familiar y jamás se refieren a su vida personal y menos aún a las de sus hijos: “Queremos que nuestros hijos tengan la misma vida normal que nosotros tuvimos. Nunca queremos robarles lo que tiene porque entonces nos sentiríamos realmente egoístas» ha declarado la rubia estrella.
Es bien sabido que Blake y Ryan forman una de las parejas más glamorosas del mundo artístico. Siempre se los ve felices en sus apariciones públicas y parece ser que este estado habitual es alimentado permanentemente por el inmejorable sentido del humor del que cada uno hace gala constantemente. A punto tal que son conocidas las bromas que se prodigan mutuamente y que hacen las delicias de los seguidores y fanáticos de la pareja en las redes sociales. Con el paso de los años, pareciera ser que están hechos el uno para el otro.
El matrimonio ya se conocía desde hace bastante tiempo antes de formalizar su relación, llegando incluso a coincidir en la película «Linterna Verde» en 2011. Sus relaciones afectivas previas fueron rimbombantes: Reynolds contrajo matrimonio con la escultural y talentosa Scarlett Johansson con quien duró dos años en el intento y Lively fue tapa de medios por cazar, al menos por medio año, al chico rebelde Leonardo DiCaprio. No obstante cuando ambos decidieron salir de la «friend zone», ya no habría marcha atrás.
Todo comenzó con un baile en un restaurante vacío en el Tribeca neoyorquino y culminó en boda en septiembre de 2012 en Carolina del Sur. “Si hay un momento en mi vida que me ha hecho madurar, ha sido tener hijos. Y a mi esposa, ¡ni te cuento!”, declaró el actor hace un tiempo. Regresando al humor del que habitualmente hacen gala, en diferentes declaraciones han bromeado sobre aquella lejana primera cita, dando entender que tuvieron sexo como corolario de la noche o sobre unos supuestos “fuegos artificiales” con los que terminó el encuentro, pero que según Lively, fueron sólo para él.
La seña de identidad de Lively son sus rasgos físicos y la vestimenta que luce, al más puro estilo Old Hollywood. Blake ha sido nombrada como una de las «100 personas más influyentes» por la revista Time, «La Mujer más deseable» por la revista AskMen.com y una de las «Mujeres más Bellas» por la revista People. Recordemos que Lively debe especialmente su notoriedad en el mundo del espectáculo, por interpretar al personaje de Serena Van Der Woodsen, en la serie Gossip Girl de la cadena The CW emitida desde el año 2007 al 2012.
Por el lado de Ryan Reynolds, se ha convertido en toda una celebridad por su enorme talento actoral (Actúa, canta y baila) además de su muy buen parecido físico. Recientemente ha sido mencionado en una lista de la revista Variety, como uno de los actores mejores pagos de la meca del cine para el 2019. Acaba de firmar un contrato con Netflix, la plataforma de contenidos por streaming, por la impactante suma de 27 millones de dólares. Es para ser parte protagónica del film «Six Underground», una película dirigida por Michael Bay y que trata sobre un escuadrón de vigilantes financiado por multimillonarios.
