Meghan Markle y Enrique de Inglaterra finalmente son papás. La duquesa de Sussex ha dado a luz este lunes a su primer hijo, un varón que ha pesado 3,260 kgs. De acuerdo al protocolo de la corona británica, aún no se conoce el nombre del bebé, que será oficializado en los próximos días. El vástago ha nacido a las 5.26 de la madrugada inglesa y según el escueto comunicado de la familia real tanto la mamá como el niño se encuentran en perfecto estado de salud. Enrique ha presenciado el nacimiento de su hijo que se posiciona en el séptimo puesto en la línea de sucesión al trono real, tras su abuelo (el príncipe Carlos), su tío (el príncipe Guillermo) y sus primos Jorge, Carlota y Luis (que nació el 23 de abril del pasado año), además de su propio padre.
«Estoy muy contento de anunciar el nacimiento de nuestro hijo, que ha sido un niño y ha nacido esta mañana, un niño muy sano. La madre y el niño se encuentran increíblemente bien. Ha sido la experiencia más increíble que jamás habría podido imaginar. Estoy muy agradecido por todos los mensajes de cariño que he recibido, han sido increíbles», ha declarado Enrique ante las cámaras, dejando ver su inocultable alegría y felicidad por el suceso. «No he estado presente en muchos nacimientos, no… ha sido mi primera vez atendiendo en uno y ha sido fantástico, absolutamente increíble. Estoy muy orgulloso de mi esposa. Como podría decir cualquier padre, el bebé es increíble», remató entre sonrisas el hijo menor de Lady Di.
«La reina Isabel II, el duque de Edimburgo, el príncipe de Gales, la duquesa de Cornualles, los duques de Cambridge, lady Jane Fellowes, lady Sarah McCorquodale y el conde Spencer han sido informados y están encantados con la noticia», han comunicado fuentes del palacio de Buckingham en otro comunicado, reseñando además que «la madre de la duquesa, Doria Ragland está muy emocionada por la llegada de su primer nieto y ya se encuentra con sus altezas reales en Frogmore Cottage».
El embarazo de Meghan Markle fue anunciado el pasado 15 de octubre en ocasión de una gira de los duques por Oceanía. Incluso la duquesa tuvo que limitar alguna de sus actividades como producto del cansancio por sus primeros meses de gravidez. Ella misma reveló luego que su bebé nacería a finales de abril o principios de mayo. Desde el pasado 19 de marzo no se la veía en público, cuando se hizo presente con su esposo en la casa de Nueva Zelanda en Londres para expresar su apoyo por el atentado a una mezquita en aquel país.
Recordemos que los duques de Sussex se casaron el 19 de mayo del año pasado en una boda de cuentos de princesas en el castillo de Windsor, y desde siempre han mencionado su deseo de mantener todo lo relacionado con el nacimiento de su primogénito en el mayor hermetismo posible. Así lo deja saber palacio, que en otro comunicado afirman que «El duque y la duquesa están ansiosos por anunciar estas noticias tan emocionantes a todo el mundo, una vez que hayan tenido la oportunidad de celebrarlo privadamente como una nueva familia».
La bellísima Markle, de 37 años, continuó con la tradición real de parir con la asistencia de una partera en Frogmore Cottage, el nuevo hogar que comparte con el príncipe Enrique. Como se recuerda, la reina Isabel II nació en la casa de Mayfair de sus abuelos y dio a luz a sus cuatro hijos en el palacio de Buckingham o en Clarence House. Es que la intimidad que le dió su casa en el campo fue inmejorable y le ha dado la tranquilidad necesaria para alejarse del revoltoso mundillo palaciego.
Parecen haber quedado atrás con este nacimiento los vaivenes relacionados con la separación de oficinas de Enrique con el príncipe Guillermo (futuro heredero al trono), los rumores de la mala relación de la duquesa con los demás integrantes de Buckingham y el potencial nuevo destino en el continente africano que la corona británica estaría pensando para los flamantes padres, entre otros rumores y conventillos de palacio que la prensa sensacionalista londinense se encarga a menudo de amplificar.