La actriz Jennifer Lawrence regresa a la pantalla grande con un papel en la película de X-Men “Dark Phoenix”. Se trata de su primera película desde que anunció en febrero de 2018 que tomaría un año de descanso de su carrera como actriz. Fue un movimiento poco convencional para alguien que ya tenía cuatro nominaciones al Oscar, incluida una victoria como Mejor actriz para el “Silver Linings Playbook” en 2012. “Nadie diría que cuando eres una estrella tan grande como Jennifer debes tomarte un año libre, no es tan sensato”, dijo una fuente de Hollywood a The Post. “Pero ella consiguió mucho dinero con ‘Juegos del Hambre’ y puede darse el lujo de descansar”.
Lawrence, quien se mudó con su madre de Kentucky a la ciudad de Nueva York para dedicarse a la actuación a los 14 años, ha creado una vida más relajada. En junio del año pasado, comenzó a salir con Cooke Maroney, director de la galería de arte Gladstone 64 en el Upper East Side (entre sus clientes se encuentra el pintor Carroll Dunham, padre de la estrella de “Girls” Lena Dunham). Ambos anunciaron su compromiso este año, y las fuentes esperan que las familias de la pareja estén muy involucradas en la preparación de la boda.
Los padres de Maroney, el vendedor de arte James Maroney y Suki Fredericks, son dueños de Oliver Hill Farm en Vermont, un lugar muy popular para celebraciones de bodas. Para su fiesta de compromiso celebrada el mes pasado en Brooklyn’s River Cafe, Lawrence llevó un vestido rosa de su prima Lauren Wells, una diseñadora de vestidos de bodas que fundó la etiqueta L. Wells Bridal. Según una fuente cercana a la actriz, la pareja ha estado buscando apartamentos en Manhattan: “Jen y Cooke tienen una relación de confianza muy feliz. Puedo ver que se toman el tiempo para viajar juntos, con Cooke acompañando a Jen en el set”.
En 2015, Lawrence dijo al presentador de “Late Show” Stephen Colbert que era un trabajo difícil ser “J. Law.” “No dejo de trabajar, porque soy una pony show. No tengo otra opción”, explicó. “Así que sigo adelante hasta que finalmente mi cuerpo diga: ‘Si no la hacemos vomitar o nos desmayamos, no se detendrá’”. Aunque no estuvo frente a una cámara este año, la actriz estuvo poniendo en marcha planes para su regreso. “Es posible que Jennifer no haya estado actuando este año, pero tiene una tonelada de proyectos en los que ha estado trabajando”, dijo la fuente cercana.
“Dark Phoenix” será el último papel de Lawrence en la franquicia X-Men. Pero en las próximas semanas, está programada para comenzar a filmar un proyecto en Nueva Orleans con la aclamada directora de teatro Lila Neugebauer, interpretando a un soldado que sufre una lesión cerebral traumática en Afganistán. Después de eso, está programada para protagonizar como la deshonrada fundadora de Theranos, Elizabeth Holmes, en la adaptación cinematográfica del libro “Bad Blood”. «Las películas son la prioridad de Jennifer”, dijo la fuente cercana.
También se dice que está feliz de poner distancia entre ella y el escándalo de agresión sexual con Harvey Weinstein. La compañía del ejecutivo produjo la película “Silver Linings Playbook”, y una fuente en el mundo de Weinstein confirmó que el magnate quería convertirla en su próxima chica dorada. “Jennifer es su mujer ideal”, dijo la interna de Hollywood. “Incluso cuando ganó el Oscar, nunca asistió a las fiestas anuales de los Oscar de Harvey en los años posteriores a su victoria”.
Lawrence ni siquiera le agradeció a Weinstein durante su discurso de aceptación de los Premios de la Academia, aunque ella calificó la omisión evidente como un “error de memoria” semanas después. “En los Premios GLAAD en 2013, tuvo que aparecer en el escenario para darle un premio a Bill Clinton junto Harvey y al parecer no pudo alejarse de Harvey lo suficientemente rápido después”, agregó. “Él le pidió que se uniera a él para tomar una copa y ella dijo: ‘No, estoy bien’. Ella estaba claramente alejándose de él. Ella siempre veía a Harvey por quien él realmente era”.
Se dice que Lawrence se puso furioso en diciembre, cuando una actriz que presentó una demanda contra Weinstein afirmó que el productor le había dicho: «Me acosté con Jennifer Lawrence y mira donde está; acaba de ganar un Oscar”. En una declaración, Lawrence respondió: “Nunca he tenido nada más que una relación profesional con Weinstein. Este es otro ejemplo de las tácticas y mentiras depredadoras en las que se involucró para atraer a innumerables mujeres”. La estrella socialmente consciente también pasó el año pasado trabajando detrás de la escena para RepresentUs, una organización activista dedicada a involucrar a los jóvenes en el proceso político.
