Casi desde el momento en que se supo que Harry y Meghan estaban esperando su primer hijo en común, se comenzó a especular acerca de la manera en que educarían al pequeño y si seguirían los pasos y el protocolo de los duques de Cambridge, quienes contrataron a una de las niñeras formada en el prestigioso centro educativo Norland.
Los duques de Sussex ya contrataron una niñera para cuidar a Archie, pero la misma duró solo 12 días renunciando a su cargo por «diferencias irreconciliables». Algunas fuentes han dicho que al parecer Meghan no deja que su hijo esté con otra persona por largos períodos de tiempo, lo que tiene que ver con su afán de controlar todos los aspectos de su vida.
Claro esas “diferencias irreconciliables” podrían tener que ver con el carácter de Markle. Eso es lo que sospechan y, hasta afirman, en los medios británicos. Dicen que Meghan insiste en exigir que su bebé no esté ni un minuto solo. Hasta cuando su hijo está dormido quiere que haya una niñera pendiente de él. Las nannies tienen que dedicar cada minuto del día a vigilar a Archie. Aseguran que Meghan resulta demasiado exigente y controladora.
Ahora, luego de contar con la inestimable ayuda de su madre Doria, la ex protagonista de Suits contrató una niñera fija. Eso sí, antes la hizo firmar un contrato de confidencialidad. Según el portal Entertainment Tonight, el primer paso a la hora de abrirle las puertas de su hogar habría sido asegurarse de que firmara un extenso acuerdo de no divulgación.
Pese a contar con una mujer especializada, Meghan se estaría ocupando casi a tiempo completo de su bebé y eso hace que esté despierta casi toda la noche, para estar activa si Archie necesita algo. Eso explicaría, de acuerdo a las declaraciones de Katie Nicholl (periodista especializada en la familia real), el aspecto algo desmejorado que supuestamente habría lucido en las celebraciones oficiales del cumpleaños de la reina Isabel II.
Ahora, los duques de Sussex se están preparando para su próximo viaje. Según la revista People, la pareja visitará África próximamente. Harry y Meghan viajarán a Sudáfrica, Angola y Malawi. La madre del príncipe, la difunta princesa Diana, pasó un tiempo en el continente haciendo obras de caridad, y ahora su hijo menor es quien continuará honrando su legado.
Poco antes de su muerte en agosto de 1997, Lady Di caminó por un campo minado mientras visitaba Angola. Los campos fueron limpiados por HALO Trust, el cual se originó en 1988 en respuesta a la catástrofe humanitaria mundial causada por las minas terrestres. Ahora, se espera que los duques se enfoquen en su organización benéfica, Sentebale, durante su estadía en Malawi. Diversas fuentes han indicado que la visita de los miembros de la familia real a África podría tener lugar este otoño. Queda por ver si Archie también hará el viaje