Anoche se llevó a cabo uno de los eventos más importantes para la música de habla hispana, los Grammys Latinos, y los artistas españoles volvieron a su país muy contentos. Alejandro Sanz se llevó tres premios y Rosalía, la gran ganadora de la noche, acumuló cinco. Uno de ellos fue el “Álbum del año” por “El mal querer”.
Claro que todos estos logros en la noche vinieron acompañados de fantásticos looks. Para su llegada a la alfombra roja decidió dar un homenaje al flamenco con un vestido negro de lunares blancos XL. Un diseño mini de manga larga y con una gran cola que llegaba a tocar el suelo, firmado por Carolina Herrera.
Para su actuación sobre el escenario, una de las más esperadas de la noche en la que interpretó “Con Altura”, la cantante eligió un diseño de corte urbano. Un bodie de raso con mangas largas de tul abullonadas, adornado por una faja blanco con flecos estilo japonés. Sus características zapatillas blancas con plataforma de la marca Naked Wolf y su exagerada manicura completaron el estilismo.
Después de la actuación llegaba el momento de la entrega de premios y Rosalía subiría hasta tres veces a recoger alguno, los otros dos fueron para los ingenieros de sonido y para los responsables del packaging de su álbum. La catalana cambió completamente de estilo y se puso un traje de saco y pantalón. Pero no uno cualquiera. Eligió uno de Carolina Herrera de tejido brillantes con mangas abullonadas y shorts y lo acompañó de un sujetador con aplicaciones de pedrería.
Remató el look con un collar negro y unos lentes de sol con correa. Se pintó la entreceja y se puso el grillz, un accesorio típico del hip hop que se coloca en los dientes. Estos dos elementos forman parte de la estética de su último videoclip, «A palé», y que parecen haber llegado para quedarse en la artista consagrada.