SALTA (Redacción) – El arte es un valor compartido por todos aquellos que apuestan a ésta como una forma de mejorar el mundo y potenciarnos como seres humanos. En esta oportunidad, el teatro nos invita a ser parte un encuentro para conocer la vida y obra de una mujer paradigmática en la historia del arte de nuestro país, Lola Mora. Este martes 12, el Grupo Teatral “Candilejas” repondrá la obra “Aquí mora Lola Mora”. Será a las 22 horas en la Parroquia San Jorge, Pellegrini 250. La entrada general tiene un valor de $200.
Bajo la dirección de Omar Pizzorno, Lila José (también autora de la obra) y Andrea Yacuzzi se ponen en el papel de la artista y su obra maestra, respectivamente. El escenario se convierte en un espacio íntimo, cercano al espectador, en el que acontece un sueño donde dialogan la célebre escultora Lola Mora y la Venus de la Fuente de Las Nereidas, la más famosa de sus esculturas. El transcurrir de este encuentro nos permite recordar y transitar la biografía de Lola, con todas sus alegrías y penas.
Entre luces y sombras, en un tiempo sin tiempo, en un espacio sin espacio, las protagonistas cincelan sus historias, como un mármol, con sutiles pliegues y despliegues. Lo hacen con amor filial, con el corazón y con un fervor manifiesto por el Arte. Al final de su vida, ¿sabrá Lola cuál es su última morada? Ésta es la síntesis argumental de aquello que se traduce a medida avanza la obra, animándonos a conocer su historia, profundizar en ella y reflexionar en relación al arte y el papel protagónico de la mujer.
Lila José es una actriz y dramaturga conocida además por homenajear en sus obras a mujeres argentinas que lucharon por la igualdad de derechos. Esta no es la excepción. Retomemos su declaración en una entrevista previa a Salta4400.com, en la que explicitó el mensaje que buscaba difundir a través de esta obra teatral: “el arte es un medio de salvación, de sublimación, porque ella es un genio artísticamente, como escultora, y esa seguridad y esa templanza y valor se lo da porque ella cultiva el arte”.
Una mujer, una escultura, un antes y un después en la historia argentina
Dolores Candelaria Mora Vega nació en la localidad de Trancas, al norte de Tucumán en 1866.Es considerada la primera escultora argentina y entre sus obras principales se destacan: La Fuente de las Nereidas, en la Costanera Sur, Ciudad de Buenos Aires, 1903; motivo que nos invita al encuentro en esta fecha. La misma representa a las nereidas asistiendo al nacimiento de la diosa Venus, considerada a diosa del amor, la belleza y la fertilidad de la mitología romana.
Si hacemos foco en esta escultura e hilamos finito, su gran inauguración resultó polémica ya que escandalizó a la sociedad de entonces, pues se observaban cuerpos desnudos en una época donde las mujeres sólo mostraban los tobillos. “Lamento profundamente que el espíritu de cierta gente, la impureza y el sensualismo hayan primado sobre el placer estético de contemplar un desnudo humano, la más maravillosa arquitectura que haya podido crear Dios”, reflexionaba Lola al respecto.
Lola Mora es un ícono invaluable para los argentinos, que cada vez suma mayores reconocimientos por su arte y todo lo que atravesó en pos de su decisión artística. Vale recordar y retomar un pensamiento de la artista que lo explica todo, y al que hizo carne propia hasta sus últimos días: “El arte es la respuesta del hombre a la naturaleza y su superación”. “Aquí mora Lola Mora” es un ejemplo de ello.
