SALTA (Redacción) – Los efectivos provinciales desbarataron a un red que se dedicaba a la venta de celulares robados en la capital. Además, durante este procedimiento detuvieron a un delincuente y a dos motochorros. En este marco, la Policía de Salta encontró 37 teléfonos y numerosos dispositivos tecnológicos que estaban listos para comercializarse ilegalmente. A raíz de ello, los tres malvivientes quedaron a disposición de la Unidad Fiscal Contra Robo y Hurto (UNICROH) y del Juzgado de Garantías N° 7.
Particularmente, las autoridades de la UNICROH mencionaron que habían investigado a esta organización a lo largo de los últimos tres meses. Al respecto, destacó que División Delitos contra la Propiedad finalmente logró identificar al sujeto que estaba a cargo de esta red clandestina. Además, indicaron que los oficiales habían descubierto que estos malvivientes llegaban a sus manos a través de los delitos que perpetraban terceras personas.
Cuando los investigadores reunieron suficiente evidencia, la Justicia provincial ordenó el allanamiento de la vivienda situada en la avenida San Martín. Justamente, los agentes concretaron estas acciones el pasado domingo. Mientras demoraban al sospechoso de 31 años, encontraron 37 celulares, cuatro tablet, una notebook, y numerosos chips y tarjetas de memorias. A su vez, los uniformados arrestaron a dos motochorros de 20 y 19 años, quienes se presentaron en la casa para entregar un teléfono recientemente robado.
Arresto en la capital
Por otra parte, la Policía detuvo a dos hombres que caminaban armados en el barrio Juan Manuel de Rosas. De esta manera, secuestraron dos armas de fuego, cartuchos y armas blancas. Precisamente, indicaron que los efectivos salteño se encontraban en este sector de la ciudad de Salta llevando a cabo labores de prevención del delito. Sin embargo, observaron que dos individuos se estaban movilizando por la manzana B sin cumplir el protocolo sanitario.
A raíz de ello, los oficiales los interceptaron y les pidieron que se identificaran. Sin embargo, no solo les comentaron que estaban violando las normativas de la emergencia sanitaria. Al mismo tiempo, advirtieron que estos hombres de 34 y 24 años portaban un revolver, una escopeta, un aire comprimido, dos puñales y cartuchos. Al comprobar que ninguno poseía la documentación respectiva, decidieron detenerlos y que queden a disposición de la Justicia.
