SALTA (Redacción) – Un asaltante terminó condenado por un curisoso episodio que ocurrió el pasado 21 de mayo en el centro de la ciudad de Tartagal. Esa jornada violentó la traba de seguridad de una motocicleta estacionada en la vía pública y se la llevó. Sin embargo, las autoridades lograron individualizarlo a partir del análisis de cámaras de seguridad y terminó detenido. En juicio abreviado recibió prisión domiciliaria y deberá pagar una enorme multa.
De esta manera, como bien detallaron desde el Poder Judicial de Salta, lo condenaron a la pena de tres años de prisión de ejecución condicional. Puntualmente, el juez de la Sala II del Tribunal de Juicio de Tartagal, Anastasio Vázquez Sgardelis, lo encontró culpable por ser autor del delito de «robo calificado en circunstancias del hurto calificado». Entre varias medidas, el ladrón deberá «fijar domicilio y someterse al control de un patronato».
Además, el magistrado ordenó que el ladrón deberá «abstenerse de acercarse a la víctima», a quien le robó la moto estacionada. «Tampoco podrá consumir estupefacientes ni abusar de la ingesta de bebidas alcohólicas», agregó en su fallo Vázquez Sgardelis. Del mismo modo, Franco Lionel Márquez también tendrá que pagar cincuenta mil pesos. Esta sanción económica se dictó «en concepto de reparación del daño causado».
Cabe señalar que una vez finalizada la audiencia el viernes pasado recuperó su libertad y deberá cumplir las normas mencionadas para evitar la prisión efectiva. La pena fue acordada por el fiscal penal 2 de Tartagal, Rafael José Medina, quien representó al Ministerio Público, y la defensa en el juicio abreviado. En tanto, al momento de la audiencia, los imputados reconocieron haber cometido el hecho.
Condenado por robo en Orán
Por otra parte, en un juicio abreviado Guillermo Alejandro Lazarte recibió un año y seis meses de prisión efectiva por robo. Sin embargo, el juez unificó la condena de esta causa con una anterior, y le impuso una la pena única de seis años y ocho meses de prisión efectiva. En la audiencia reconoció haber cometido el delito por el que llegó acusado. Relató que interceptó a la víctima en la vía pública en 2019, lo amenazó con un cuchillo y le sustrajo un teléfono celular.
