SALTA (Redacción) – Guadalupe Colque se forjó a sí misma y se abrió paso en la comunidad salteña valiéndose de su vocación de servicio, compromiso y lealtad hacia el prójimo. Como reconocimiento por sus más de treinta años de entrega y trabajo, el actual Gobernador, Gustavo Sáenz, la invitó a incursionar en el mundo de la política para continuar su misión abocada al trabajo social.
Quien fue la titular de la Subsecretaría de Relaciones con la Comunidad, Guadalupe Colque, señaló que “el trabajo social que hacía era de corazón”. Tras cuatro años de constante labor en la política, Guadalupe Colque renunció sin más, poniendo en jaque a la gestión de Bettina Romero. En una entrevista brindada a Radio Aries 91.1 FM, la misma destacó que resultó ser un gran desafío y una enorme experiencia. «Agradezco un montón al doctor Sáenz por haberme dado esa oportunidad”, destacó.
“Durante estos 4 años he desarrollado una labor social con todo mi alma, corazón, compromiso. Me ha permitido crear muchos vínculos con la gente de los distintos barrios, asentamientos, ferias, por todos los lugares en donde anduve”, recordó en la entrevista. Asimismo, manifestó que si bien apostó a la fórmula Gustavo Sáenz – Bettina Romero, los hechos le demostraron que ese no era el camino.
“Cuando llegó el momento político del cambio, yo aposte a esa fórmula porque pensé que esto era la continuidad, la misma visión del trabajo que se iba a realizar, por eso opte por quedarme en la Municipalidad, por supuesto invitada por la señora Intendenta. Pero bueno, uno sigue aprendiendo en mi medio siglo. No fue como yo creí, no pude desarrollar el trabajo que venía haciendo, porque el nuevo secretario tiene otra óptica, otra visión, es diferente, es otra gente”, analizó.
Santiago Lynch, el nombre que da vuelta por los pasillos
Quien hoy es el secretario de Desarrollo Humano, es un trabajador de Buenos Aires. Colque expuso que el mismo ya ha realizado otras funciones, por ejemplo en ANSES. Lo cierto es que, no se sintió a gusto con la forma de trabajo implementada por Lynch. “No he podido encajar en ese grupo de alguna manera y hoy priorizo mi tranquilidad, mi familia y hacer las cosas que más amo, que es mi compromiso de vida que es la fundación HOPE”, afirmó.
Asimismo, la extitular explicó que el equipo de trabajo se desarmó paulatinamente, debido múltiples motivos que permiten comprender las irregularidades en el trato por parte de las autoridades. “A toda la gente la fueron trasladando a distintos lugares o fueron renunciando o directamente se les cancelo el contacto, se fueron. En cierta forma me quede sola, me quede sin equipo y mi preocupación es también por los que quedaron porque incluso sufrieron ayer unos tratos de la oficina”, reveló.
La “familia municipal” como caracteriza Guadalupe a sus compañeros se deshizo sin más. Por su parte, se encontró entre la espada y la pared. “Yo siento que no puedo desarrollar las cosas que yo quiero. Si bien es cierto que me han ofrecido ir a otras áreas, no es lo mío. A esta altura de mi vida puedo decir que trabajo quiero hacer, por el que siento que voy a poder brindarme, ser franca, no mentir, hoy no lo puedo hacer”, disparó.
Guadalupe Colque decidió dar un paso al costado. Otra pérdida mayúscula para la gestión.