SALTA (Redacción) – El interior vuelve a estar en la boca de todos y aunque la pandemia parecía suficiente no lo es. A pesar de las medidas preventivas y obligatorias que rigen en la actualidad, hay decisiones políticas que las pasan por alto y que además se valen de la coyuntura para llevar adelante intereses personales; acciones que son repudiadas por los mismos referentes del sector. En este marco, se conoció que el vicepresidente del Concejo Deliberante de Orán, Javier Ramírez, presentó su renuncia en el marco de un escándalo de público conocimiento.
Tras una bochornosa audiencia ya realizada y el intento por parte de la Presidencia de una segunda para lograr un aumento en la Unidad Tributaria Municipal (UTM), Javier Ramírez, renunció a su cargo de vicepresidente. El mismo aseguró que continuará trabajando desde su rol como concejal radical. El mismo dio múltiples entrevistas dando detalles de los motivos que lo llevaron a tomar esta polémica decisión.
En una entrevista publicada por Diario El Oranense, el edil aseguro que continuará ocupando su bancada. Sin embargo, no acompañará más a la presidencia de Lucas Tévez. Ramírez considera que principal promotor de la audiencia que no estaría configurada ni autorizada en los requerimientos legales y sanitarios de este momento histórico es el Presidente del Concejo, Lucas Tevez.
Con mucho pesar, Ramírez explicó que asumió su responsabilidad desde el momento y recordó que apostaron a la experiencia que tenía la presidencia. Pero, diferentes decisiones pusieron en el ojo de la tormenta a Tevez, quien no hizo más que ganarse el repudio de buena parte de sus pares. Ramírez explicó que la audiencia pública es “la gota que rebalsó el vaso”
Decisiones arbitrarias que perjudican y entorpecen
El ahora ex vicepresidente del Concejo Deliberante de Orán, considera que realizar esta audiencia pública va en contra y desestima todas las medidas que establecen los decretos de necesidad y urgencia firmados en torno a pandemia de Coronavirus. Ramírez apuntó a que no se puede dejar de lado el contexto sanitario y que llamar a una audiencia pública sólo complica más al ciudadano.
“Estamos cometiendo un error gravísimo porque no cambia la situación”, subrayó. Asimismo, explicó que la audiencia incluye al día 31, y por ende, de concretarse, dejaría afuera a todas las personas que no estén habilitadas para circular por la terminación del DNI. Por todo esto, Ramírez, considera que no comparte la forma de conducir y el tratamiento de algunos asuntos por parte de la presidencia.
“La audiencia viola disposiciones provinciales”, recalcó en relación a la prohibición vigente para realizar eventos de convocatoria masiva. “Debemos fomentar el cumplimiento sin interpretar las leyes a nuestra conveniencia”, destacó el edil. Cabe señalar que el mismo entiende que es necesario actualizar las cargas tributarias para mejorar la calidad de vida. A pesar de ello, considera “inoportuno hacerlo en tiempo de pandemia”.