SALTA (Redacción) – El presidente del Ente Regulador de Servicios Públicos de la Provincia, Carlos «Uluncha» Saravia, analizó la cobranza del agua y lamentó la diferencia entre «el sector pudiente» y las personas de los barrios como Solidaridad. Además, aseguró que «no es tan fácil» hacer el control del agua pero que buscan que la calidad esté asegurada. En otro punto se refirió a consumo de la planta de Coca-Cola y las mineras.
«En estos tiempos de emergencia sanitaria, me parece que la visión tiene que ser ecuménica. Amplia para mirar a todos los actores involucrados para que se armen los consorcios de agua y sean responsables», señaló el titular del Ente Regulador. Por esto agregó: «Fue muy critico con los country, es decir conglomerados de viviendas como el Tipal y clubes de casas para un sector pudiente. Lo que ellos hacen es cuando hacen el desarrollo, van a pedir el cano de riego a recursos hídricos«.
«¿Cómo puede ser que un club de campo este pagando por hectárea y mes, $400 en concepto de canon por riego? Esto quiere decir que mientras el sector acomodado que tiene para pagar, abona mínimos montos, una persona en Solidaridad por ejemplo, paga mil o dos mil pesos de agua por un lote de 10 por 20″, cuestionó. Asimismo lamentó: «Este desequilibrio es de siempre. Hay un tratamiento de recurso hídrico similar al que tiene el productor agropecuario».
Por otra parte, Saravia apuntó que nadie sabe cuánto gasta la Coca-Cola de agua: «En Salta se afora, así se llama el procedimiento de calcular cuánto tiene de caudal una vertiente o pozo. Por eso también se establece un límite ya que el consumo no es ilimitado y de repente el problema surge cuando se le dice, usted va a tener cierto metro cúbito de agua por día y nadie lo mide». Del mismo modo reveló: «Con las mineras sucede exactamente lo mismo2.
«Todos los colegios católicos van a pagar los servicios»
«El Estado tiene que avanzar con los controles, hay muchas concepciones otorgadas y hay empresas que dicen ser mineras y nunca hicieron una inversión. Es tarea de la Legislatura de buscar la equidad», completó el funcionario. Sobre otra cuestión, mencionó que desde su lugar, busca brindar subsidios a quienes realmente se lo merecen como organismos públicos. «Hay que ser rigurosos con los requisitos, nosotros esperamos que las personas sean responsables», consideró.
«Con respecto a la iglesia, hemos llegado al acuerdo con el Arzobispado que todos los colegios privados que cobran cuota, no tendrán el subsidio», anticipó. Por ello explicó: «Había 550 inmuebles del Arzobispado o por ejemplo de la prelatura de Cafayate que tiene 46 y todos estos inmuebles estaban eximidos de pagar. Esos 550 inmuebles de la iglesia representaban 24 millones».
Finalmente detalló: «Ahora hay que pensar que estos inmuebles se llevaban un beneficio equivalente a ocho mil familias. En algunos casos eran alquilados, otros no eran ni el lugar del templo. Lo que hicimos es no pelearse con la Iglesia y agradezco que entendieron haber quedado afuera del beneficio».
