SALTA (Redacción) – Militantes del Partido Obrero y sus principales dirigentes en Salta realizaron un reclamo frente al Ministerio de Educación. El mismo se dio como consecuencia del despido de 18 ordenanzas en el departamento de Orán. Pablo López fue uno de los dirigentes que participó de este reclamo.
El referente de la izquierda salteña cuestionó el despido de los ordenanzas y explicó como era su situación contractual. “Son trabajadoras y trabajadores con un salario de 10 mil pesos, que ni siquiera tienen un contrato. Son tomados por el municipio, que actúa como una especie de terciarizador de la provincia”, explicó.
Pablo López continuó con sus cuestionamientos y apuntó con dureza al gobierno provincial. “Además, tenemos un déficit de 1600 ordenanzas en toda la provincia, en medio de una presencialidad forzada por el gobierno, que no ha garantizado las condiciones para las clases presenciales”, señaló el dirigente.
Haciendo énfasis en las clases presenciales, Pablo López aseguró que estas se dan como consecuencia de las presiones de algunos empresarios. “Incluso, en algunos casos, los protocolos fueron impuestos por los propios trabajadores”, aseguró el referente del Partido Obrero que se mostró sumamente crítico a la presencialidad en las escuelas.
“En los casos en los que no pudieron lograrlos hemos tenido situaciones complejas”, agregó. “Muchas empresas no han establecido protocolos estrictos y en muchos casos han forzado a sus trabajadores a trabajar en condiciones de riesgo”, concluyó Pablo López que se mostró en contra de las actividades presenciales en distintos ámbitos.
