SALTA (Redacción) – Atacaron a piedrazos a un colectivo en la ciudad de Salta. Esta vez, la agresión a la unidad de SAETA se produjo anoche en el barrio Solidaridad. A causa de este episodio, varias ventanillas quedaron destrozadas. Incluso, algunos de los vidrios cayeron sobre una pasajera. Sin embargo, desde la empresa reportaron que ninguno de los ocupantes sufrió heridas de gravedad. En tanto, se investiga la identidad de los autores de este hecho.
Al respecto, la compañía informó que este nuevo ataque se desarrolló a las 21.10. En ese momento, el rodado N° 792 de la empresa Alto Molino llevaba a cabo el recorrido habitual de la línea 7C. Por entonces, se encontraba en la avenida 120, cerca del Hospital Papa Francisco. En ese momento, súbitamente varias piedras impactaron contra las ventanas laterales de la unidad. Ante ello, varios vidrios quedaron destrozados. Además, algunos pedazos cayeron sobre una mujer que estaba a bordo.
Ante esta agresión, el conductor paró la unidad e inmediatamente revisó el estado de salud de la damnificada. Rápidamente, puso nuevamente en marcha la unidad y se dirigió hasta el Hospital Papa Francisco. Una vez que la pasajera recibió asistencia médica, el chofer radicó la denuncia. Igualmente, los efectivos ya estaba al tanto de esta emergencia, ya que el trabajador había apretado el botón anitpánico después del ataque. En tanto, se investigarán los registros de las cámaras de la zona para poder identificar a los malvivientes.
Ataques a colectivos
Particularmente, esta agresión se produjo poco días después de que cinco unidades recibieran diversos ataques en el barrio Castañares. En esos casos, los colectivos involucrados estaban efectuando los recorridos de las líneas 7A y 7B. Durante esa noche, cuatro conductores que transitaban entre a la madrugada del domingo 12 denunciaron que sus rodados habían sido apedreados. Al mismo tiempo, un chofer se presentó en una comisaría de la capital porque había sido amenazado a bordo del vehículo.
A causa de esta situación, las autoridades de SAETA adoptaron una medida de fuerza para prevenir nuevos episodios de violencia. Rápidamente, modificaron las rutas de estas líneas de manera unilateral. Esta determinación provocó la indignación de los vecinos de la zona norte de la ciudad, ya que les genera complicaciones a los usuarios que se movilizan en horario nocturno. En este marco, se presume que la empresa podría tomar una decisión similar ante este nuevo hecho de inseguridad.