SALTA (Redacción) – El gerente del hospital Del Milagro, Juan José Esteban, se refirió al “desastre de los aglomeramientos” que provocó en Salta la reapertura de la actividad bancaria. Y aseguró que “Salta tendría que tener más casos de COVID, pero nos está protegiendo un manto divino”, dejando a libre interpretación si nuestra Salud Pública depende de Dios o si hay un “manto”, o algo que está tapando lo que realmente pasa en la Provincia.
Debido a las fechas de paso, miles de salteños volvieron a circular las calles. En tiempos todavía de cuarentena la preocupación por un posible contagio de coronavirus, por esta exposición, resonó en la autoridad del hospital Del Milagro. También se mostró angustiado y preocupado por la actitud que tuvo el salteño en estos últimos días dijo en La Gaceta no comprender “por qué hay una exposición innecesaria para pagar una boleta, si saben que se prorrogaron las fechas de vencimiento”.
En el mismo sentido, remarcó que “tenemos un manto de piedad cubriéndonos, porque si se hace la proyección de la enfermedad a nivel mundial, no te explicas porqué aquí en Salta no hay circulación comunitaria viral”, relató el médico. A lo que agregó que “no hemos ni siquiera pasado a la segunda fase llevando un mes de pandemia. Hay algo que nos está bendiciendo, porque después de la conducta del viernes pasado y si llegamos al 26 sin casos, claramente tenemos a alguien arriba que evita que no haya casos”.
De la misma maneta, el profesional médico expresó el sentimiento que en Salta se están “bajando los brazos” indicando que los controles policiales debieran ser más estrictos. “País que se guarda, país que anda bien estadísticamente en casos de COVID-19. Eso no lo estamos entendiendo aquí, y me pregunto, dónde está la responsabilidad de los salteños para evitar ser transmisores”, reflexionó Esteban, quien es parte del comité provincial.
Uso obligatorio del barbijo
“Me paro un rato a observar a la gente y lamentablemente el manejo de barbijo es fatal. No cumple con las funciones para lo cual se decidió que se transite con esta tapa bocas”, explicó el gerente. Por lo que indicó que estar tanto tiempo esperando en una fila, provoca que en algún momento la persona se toque el barbijo, por lo que, si no tiene desinfectadas las manos permanentemente, la función de la mascarilla pierde efectividad. Recomendó portar alcohol en gel y tocar lo menos posible el producto.
