SALTA (Redacción) – La pandemia y el aislamiento social preventivo y obligatorio obligó que numerosos organismos del Estado provincial debieran implementar alternativas para continuar funcionando. De esta manera, el Poder Judicial de Salta ya ha implementado diversas herramientas tecnológicas para darle seguimiento a los procesos penales. A raíz de esta modificación, esta mañana condenaron a cárcel a dos hombres por medio de Whatsapp.
Desde su despacho, el juez de la Sala II del Tribunal de Juicio, Ángel Amadeo Longarte se comunicó por videollamada con el fiscal penal de General Güemes, Gabriel González. Particularmente, González se encontraba en su oficina junto a uno de los imputados, José Rodrigo Gallardo. Particularmente, el acusaba permanecía en libertad, debía respetar medidas sustitutivas. En tanto, Juan Martín Tapia escuchó la sentencia desde la Alcaidía.
Por medio de una audiencia de juicio abreviado, el magistrado halló culpables a ambos sujetes. Justamente, los dos habían perpetrado delitos contra la propiedad en la localidad de en General Güemes durante diciembre de 2019. Por un parte, Gallardo deberá afrontar un castigo de un año de cárcel de ejecución condicional. En tanto, le dictó la pena de un año y dos meses de prisión a Tapia. Además, dictaminó que tendrá cumplirla dentro del penal, ya que fue declarado reincidente por quinta vez.
Robo de ganado
En otro orden, tres hombres quedaron imputados por robo de ganado en la localidad de El Galpón. Rápidamente, el fiscal penal en feria extraordinaria, Gonzálo Gómez Amado, resolvió las acusaciones contra estos sujetos. A cargo de la Fiscalía Penal 1 de Metán, estableció que los detenidos son presuntos coautores del delito de abigeato agravado. Concretamente, se trata de Rubén Alberto Roldán, de 37 años; Matías Roberto García, de 33 años; y Neri Gerardo Lizárraga, de 32 años.
El episodio por el que quedaron arrestaron ocurrió el pasado martes 28 de abril. En ese momento, un productor agropecuario escuchó una serie ruidos en su campo, que se encuentra al lado del río Medina. Horas después, un familiar le comentó que un grupo de sujetos habían vendido dos de sus vacas al matadero. Posteriormente, identificó a los animales y radicó la denuncia. Además, reportó que no era la primera vez que sufría esta clase de delitos. Pocas jornadas más tarde, la Policía de Salta concretó la detención de estos malvivientes.
