SALTA (Redacción) – En las últimas horas se conoció la triste noticia de un incendio forestal de grandes proporciones en tierras ancestrales de la comunidad originaria Kolla Tinkunkaku. Precisamente, dentro de la Reserva Natural – Bosque Nublado Yungas de Salta. A través de un comunicado, advirtieron que «el fuego se reactivo» y que se estima que la zona afectada seria de más de 9000 hectáreas. «Se espera un auxilio nacional e internacional de ser posible por intermedio de los organismos competentes de la provincia y la nación», solicitaron con urgencia.
El urgente pedido de auxilio
De esta manera, la comunidad del pueblo kolla comunicó que se reactivó el «devastador incendio» que se inició «con gran intensidad en la altura media del cerro Incahuasi (Queso Asentado – San Andrés)». Además, señalaron que se había desatado hace 3 semanas. En tanto, lamentaron: «La comunidad indefensa observa el avance del fuego con mucha virulencia hacia el sector bajo del cerro». Allí apuntaron que brindaron reporte de inmediato al organismo de defensa civil.
En ese mismo sentido, remarcaron la elevación del «pedido de auxilio y ayuda para sofocarlo al Ministerio de Seguridad de la Nación y Al sistema Federal del Manejo de Fuego». «Para lo cual técnicos de la comunidad están reportando informes y localización mediante las coordenadas geográficas, para la intervención de dichos organismos y la subsecretaria de defensa civil de Salta», describieron sobre la necesidad de frenar el incendio forestal descomunal.
Por otra parte, remarcaron una cuestión importante: «La comunidad Tinkunaku deja aclarado de manera categórica por si se suscitan, que el origen del fuego no es responsabilidad de «practicas ancestrales» de sus habitantes por quemas estacionales. Expresiones que desnaturalizan las normas comunitarias y forma de vida y prácticas de aprovechamiento de la madre naturaleza en el territorio Kolla».
Las pérdidas por un fuego que «nunca antes ocurrió con esta magnitud»
Se puede apuntar que la comunidad describió la zona afectada por las llamas. «Es un vasto territorio de 120 mil hectáreas. De variados pisos ambientes que van desde los bosques exuberantes, bosques nublados y pastizales de altura que conectan con la puna de Jujuy. Tierras de una comunidad de cultura ancestral de los kollas. Con una población de aproximado de 400 familias titulares registrales de las misma», detallaron en su comunicado.
«La comunidad lamenta los daños ambientales en una rica biodiversidad; Reserva Natural de conservación Ancestral de la Comunidad Tinkunaku. Nicho ecológico de especies de animales emblemas como la taruca (venado) y el yaguareté, aves y especies menores únicas de la región», expresaron con tristeza. Por último, apuntaron que el pueblo originario también lamenta «el estrés social y comunitario. La tensión extrema por la permanencia, que ha ennegrecido los cerros por el paso del fuego, fenómeno que nunca antes ocurrió con esta magnitud».
