SALTA (Redacción) – Luego de semanas de intensa discusión entre las autoridades políticas y sanitarias de Salta, Nación decretó que la provincia se encuentra libre de transmisión comunitaria. Así lo indica el decreto 605/2020 brindado el día de ayer por los medios oficiales del Gobierno Nacional. Por este motivo, la provincia continuará en distanciamiento social hasta el 2 de agosto.
El decreto establecido por Nación señala que todas aquellas jurisdicciones que no tengan transmisión comunitaria, podrán seguir en la fase de distanciamiento social. En ese grupo se encuentra nuestra provincia. Según Nación, todos los departamentos de Salta se encuentran aptos para regirse bajo la modalidad de distanciamiento social. Sin embargo, deberán seguir con las medidas de seguridad sanitaria establecidas para no poner en riesgo la situación epidemiológica.
Este decreto también remarca que queda prohibida la circulación en la provincia sin el Certificado Único Habilitante para circulación. Además, indica que es obligatorio el cumplimiento de las medidas de distanciamiento social de dos metros por personas, como también el uso de barbijos en espacios compartidos. Para que Salta no tenga un retroceso con respecto a la situación epidemiológica, recuerda que todos deben cumplir con los protocolos y las recomendaciones brindadas por Nación y la provincia.
Transmisión comunitaria sí, transmisión comunitaria no
Dejando de lado lo establecido por Nación este fin de semana, en Salta se mantuvieron fuertes discusiones sobre la existencia de la transmisión comunitaria. Muchas figuras políticas y sanitarias indicaron que efectivamente ésta existía, mientras que otros aseguraban que no. Los que sostenían su existencia, se basaban en el hecho de que había varios casos positivos de los cuales se perdieron el nexo epidemiológico.
De este grupo formaba parte la intendenta de capital, Bettina Romero, quien declaró: «Todo parece indicar que hay circulación viral comunitaria porque no se sabe cómo se contagiaron». Por otro lado, se encontraba el gobernador Saénz, quien sostenía que la situación epidemiológica estaba controlada. En ese sentido, tildó de irresponsables a los que hablaban sobre la existencia de transmisión comunitaria en la provincia.
