SALTA (Redacción) – Los trabajadores mineros continúan con medidas de fuerza ante la falta de respuestas por el despido de 250 empleados de la empresa Mansfield. Además, protestan por la situación sanitaria que padecen y la negativa de realizar hisopados masivos, teniendo en cuenta que hay 75 casos positivos de coronavirus en la mina jujeña Exar. Por su parte, el delegado Ramiro Frías expresó que las firmas mineras llegaron a las provincias a hacer una “destrucción laboral y negrearnos”.
«Una vergüenza» la postura del Gobierno provincial
Como bien informa el DDN, el dirigente sindical apuntó que Mansfield está hace 26 años en la provincia de Salta, recordó que es de origen peruana y apuntó que quienes “se llevan el oro” son de Canadá. Luego, puntualizó que hace 45 días los mineros despedidos están acampanado en las puertas de la oficina de la empresa. Además, describió que es “una vergüenza” el accionar del ejecutivo provincial, a cargo de Gustavo Sáenz por no hacer cumplir el decreto presidencial que prohibía los despedidos durante cuarentena.
En el mismo sentido, remarcó que exigen ser recibidos por el secretario de trabajo Alfredo Batule y el ministro de gobierno Ricardo Villada. “El gobierno se tiene que hacer cargo. Si estas empresas vienen a hacer la destrucción que han hecho, hay que rescindir el contrato y que se vayan”, manifestó Frías. Cabe señalar que los trabajadores evitaron el corte de calles y manifestaciones durante 15 días ante el pedido del gobierno provincial. Sin embargo, ante la falta de respuestas volvieron con las medidas de fuerza y ayer les enviaron la Gendarmería durante una quema de gomas.
Más de 120 días sin ingresos
Sobre la situación económica, el dirigente gremial lamentó: “No cobramos el IFE ni salario universal. El gobernador pide que hagamos cuarentena, yo le quiero preguntar con qué vamos a hacer cuarentena si hace más de 120 días no recibimos ninguna entrada de plata para darle de comer a nuestra familia». De la misma forma, apuntó contra Sáenz y advirtió: «Hay una pandemia que está matando, y el creerá que somos robots y unos números más. Si nos llega a pasar algo y nos llegamos a enfermar, o alguno llega a morir, a él se le va a hacer el juicio”.
En tanto, luego de más de un mes de lucha, los trabajadores lograron realizar un plenario con la CGT y la CTA. Allí pidieron realizar un paro general. Cabe señalar que hasta el día de hoy, no les pegaron la indemnización, tampoco los días de franco ni la totalidad de las horas laborales. Por último, Frías recordó que para la empresa “no es nada” 250 despidos, teniendo en cuenta lo expresado por Facundo Huidobro, gerente de relaciones institucionales de Mansfield.