SALTA (Redacción) – En las últimas horas el flamante ministro de Salud, Juan José Esteban, señaló que se probarán tratamientos experimentales para tratar pacientes con COVID-19. Por ejemplo la utilización del ibuprofeno sódico inhalado, sobre el cual explicaron que está teniendo éxito en Tartagal, donde lograron hasta 80% de mejoría. “Vamos a tener una reunión con los gerentes y seguramente vamos a aprobar el uso”, remarcó.
Como bien indica el DDN, el funcionario explicó: «En el hospital Señor del Milagro estamos usando ivermectina (producto que se usa para desparasitar caballos) en una dosis de 6mg semanal. Y obviamente también vamos a trabajar sobre el ibuprofeno sódico inhalado”. Por su parte, el médico Fernan López detalló sobre la implementación de este método que ya se aplicó en 12 pacientes en Tartagal.
Detalles del tratamiento
Según indicó, describieron que se lograron mejorías de entre un 75 y 80% para evitar que los pacientes con COVID-19 lleguen a la intubación. “Gracias a Dios pudimos conseguir el ibuprofeno sódico para la zona norte, que es para Tartagal. Lo estamos utilizando en pacientes desde la semana pasada”, anunció el profesional. Luego, detalló: “Se le coloca un radical libre con sodio a la molécula del ibuprofeno. De esta forma se logró que este se haga hidrosoluble y poder usarlo por vía inhalatoria, que es lo que se está haciendo”.
Allí también precisó: “Es una droga que ya tiene aproximadamente cuatro o cinco años de evolución, que se fue tratando en unos pacientes que tenían una patología respiratoria que se llama EPOC. Produce la desinflamación y la reducción del moco que se genera en los pulmones en este tipo de patologías”. “Se observó que los pacientes que tenían COVID-19, lo que les producía la muerte era la falta de oxígeno. Y se demostró que la fisiopatología en el covid-19 se produce por una inflamación del alvéolo, que es la unidad funcional del pulmón», agregó.
«Lo que haría el ibuprofenato sódico que se utiliza por vía inhalatoria es que llega al alvéolo, lo desinflama, rompe las moléculas del moco que secreta el paciente. Desinflama el alvéolo y permite que entre la oxigenación al mismo”, detalló López. Sin embargo, aclaró que no se trata de una cura para la enfermedad. “#s una ayuda para el paciente, para evitar que entre a intubación», remarcó.
“Un gran porcentaje de ellos se están recuperando”
En tanto, precisó que el tratamiento se llevó adelante en 12 pacientes con COVID-19 en Tartagal, entre moderados y críticos. “Estos pacientes saturaban a 85 con una máscara con reservorio a 15 litros. Se empezó a utilizarlo y hemos obtenido un 75 a 80% de mejoría en los pacientes”, reveló. “Un gran porcentaje de ellos se están recuperando”, destacó y remarcó que ninguno de ellos llegó a necesitar respirador.
Por otra parte, explicó que es un tratamiento que puede ser administrado a cualquier paciente sospechado de covid-19 y el costo del tratamiento es de “cero pesos”. Además, señalo que desde la experiencia en Tartagal, no se detectó ningún efecto adverso, solo un paciente tuvo un sangrado en la nariz. López destacó también que en Orán ya se comenzó a utilizar el tratamiento.
Finalmente, López aclaró la diferencia de los tratamientos como el dióxido de cloro. “Esta es una droga producida en un laboratorio, que se ha seguido un protocolo de investigación que lleva años. Se buscó otra alternativa a pacientes y se vio que tenían buenos resultados”, remarcó.
