SALTA (Redacción) – La situación en el centro de la ciudad suma tensión en torno a la confrontación entre los diferentes sectores que son parte del comercio, legal e ilegal. La crisis económica golpea por igual y la ciudad se vuelve tierra de nadie. Precisamente, en diálogo con Salta 4400, Rita, vendedora del Freeshop, dejó clara su postura al respecto de las versiones cruzadas en torno a la crisis interna que afecta de lleno la economía de los comerciantes.
“Hoy fue un día tranqui pero el sábado es de todos los días tener los vendedores en la calle. Nosotros sabemos que pagan a uno de la municipalidad. Viene un coimero todos los días, a las seis o siete de la tarde. No viene con el chaleco municipal porque viene de civil, pero viene todos los dais. Esto es cada vez peor porque venden ropa, de todo, venden medias, lencería, remeras, short, ojotas, de todo”, reveló.
En este marco, dejó al descubierto los artilugios de los vendedores ilegales para llevar adelante sus negocios. “Ellos se creen los dueños de la calle. El municipio no los saca no sé por qué. Yo sé que don Sergio movió para sacarlos. Nosotros no somos dueños de la calle ni nadie, nadie los puede sacar”, manifestó. En este sentido, consideró que el municipio mira para el costado.
La competencia desleal a la par de la falta de respuestas de las autoridades
“Hoy tenemos una intendenta que no hizo nada tampoco, porque esto no es de ahora, es de hace mucho, llamamos a la policía no los sacan, llamamos a la municipalidad y directamente no te contestan porque esto es así”, aclaró. Considerando el riesgo que significa esto para la comunidad a nivel epidemiológico, también se suma la veta económica que se ve directamente afectada.
“Nosotros no vendemos, ellos venden a dos manos y nos perjudican, porque nosotros pagaos nuestro alquiler, pagamos nuestros impuestos como todos y ellos no pagan nada. Vienen se sientan hacen la plata todos los días y se van. Eso es de todos los días, esperemos que hoy por este medio llegue a las autoridades que tiene que ponerse firmes y sacarlos”, arremetió Rita.
Asimismo, explicó que “ellos no pagan nada de nada”. De hecho, Rita comentó que cuando viene la policía les dicen que al lugar se los dio el dueño. “Es mentira, coimean a uno de la municipalidad todos los días”, comentó. Debido a la pandemia, explicó además que los inspectores no están yendo a controlar. “Cuando venían los de renta nosotros nos cansamos de decirle, nos dijeron que nosotros tenemos que dirigirnos al control”, aseveró.
Sin embargo, aseguró que se cansaron de dirigirse a control. “Yo llame más de un mes completo, vino la policía, los corrían dos segundos y volvían como si nada, o sea acá nadie hace nada, miran para el costado y sigue lo mismo”, subrayó. De hecho, manifestó que “el fin de semana que hubo mucha gente, andaba más la gente afuera que adentro”.
El triste final de los trabajadores: «acá nadie te perdona nada»
Rita se animó a contar su realidad. Desde hace 24 años está en el freeshop. Como bien lo dice ella “toda una vida”. Lo triste es que espera irse a fin de año por las complicaciones devenidas de la pandemia. “Si, está muy feo. Una porque no se vende, otra que tenemos que pagar los impuestos. El alquiler acá nadie te perdona nada y los de las calles nos terminan de matar porque aparte que no vendemos ellos venden a dos manos y ellos no pagan nada, alquiler, impuestos nada”, analizó.
En esta línea, dio cuenta de que un alquiler sale aproximadamente $10.800. “Un montón de locales se han ido, unos vuelven, viene otra gente nueva, hay un montón de locales vacíos. Esto está cada vez peor pero es por la misma situación que estamos viviendo”, advirtió. Así las cosas, la falta de dinero, las deudas, la falta de trabajo hacen que el vaso rebalse sin más. “Nosotros vivimos de esto, no tenemos otra entrada, y bueno, aguantaremos hasta donde se pueda”, concluyó.
