SALTA (Redacción) – En el marco de las nuevas flexibilizaciones, los parques urbanos de Salta volverán a abrir sus puertas. De esta forma, de a poco se va reactivando la actividad en la provincia de forma gradual, progresiva y controlada. Estos espacios recreativos contarán con un estricto protocolo para que el regreso se lleve a cabo de forma segura para todos los visitantes que lleguen. Esta decisión causó confusión entre los salteños, ya que había informado de que que la permanencia en plazas estaba prohibida.
Los parques urbanos estarán en funcionamiento a partir de este lunes 26 de octubre desde las 8 a 22 hs. En el lugar, la gente podrán disfrutar de los parques del Bicentenario y de la Familia, pero no estará permitido el uso de los juegos y de las estaciones aeróbicas. Además, desde el Gobierno provincial informaron que todos los usuarios deben cumplir con las normas sanitarias establecidas.
En cuanto a las actividades deportivas permitidas en estos espacios, la administradora de Parques Urbanos dependientes del Ministerio de Turismo y Deportes Eleonora Gallardo indicó solo podrán realizarse aquellas individuales que no requieran uso de implementos como pesas, colchonetas, discos, sogas, entre otras herramientas.
Protocolo de seguridad
Cada persona que asista a los parques urbanos de Salta deberá llevar su propia botella, toallas, y las mismas no podrán ser apoyadas en ninguna superficie. El uso de barbijo es obligatorio, tanto al ingreso como al egreso de estos espacios. También se debe respetar el distanciamiento social de dos metros entre personas y cumplir las indicaciones de las autoridades sanitarias: Higienizarse las dos manos con alcohol en gel, toser y estornudar en el pliegue del codo.
Dichas medidas se implementaron con el fin de que el regreso de estas actividades se lleven de forma segura. De esta forma, evitarán que en Salta aumenten los casos positivos de COVID-19 entre sus habitantes por culpa de estos espacios. Para finalizar, informaron que las mascotas que asistan deberán estar siempre con correas y quedan exclusivamente bajo la supervisión de sus dueños.