SALTA (Redacción) – La gestión de Bettina Romero se gana el repudio y las críticas de diferentes sectores. Día a día una protesta es parte del desayuno de los salteños. En este marco, vecinos de Barrio El Carmen decidieron apostarse en el templete a San Cayetano en torno a una protesta vecinal que repiten todos los años sin todavía tener solución alguna por parte de las autoridades.
En diálogo con Salta 4400, recordaron que la tormenta anterior hizo estragos. “Era impresionante como a la gente se le iba como en un arroyo todas las cosas, camas, lo que agarraba se llevaba. Un desastre total y hay un desagüe que no lo puede hacer la municipalidad hace un montón de años”, advirtieron. En este sentido, indicaron que deben partir por viabilizar un desagüe a la cañada que sale al canal de la Avenida Juan XXIII.
Sin embargo, insistieron en que no cuentan con soluciones. “La gente tiene que andar a la madrugada sacando los hijos en el barrio, sacando las cosas, perdiendo todo eso… nadie nos da importancia”, lamentaron. A ello, agregaron que cuentan con pozos ciegos desde hace 30 años. “Nos han prometido un montón de veces el año pasado. Nos llamaron que ya tenían todo el proyecto, que la plata estaba”, aseguraron.
Entre las falsas promesas y los riesgos para la salud
A pesar de ello, son los propios vecinos los que hoy deben desagotar los pozos. “Hay algunos que tienen tres pozos porque no tienen 3500 pesos para pagar un desagüe porque en la Municipalidad hay un solo camión y tenés que hacer un protocolo impresionante para que te pueda llegar el camión”, agregaron. Por ello, apuntaron a encontrar soluciones. “Queremos vivir dignamente”, subrayaron.
Si bien desde el gobierno provincial tanto como municipal se hacen eco del Plan Detectar Plus y el saneamiento de los espacios, los vecinos dan cuenta de otro escenario. “Venimos hablando de toda una política de dengue y tenemos todo ese canal lleno de basura”, agregaron. Además, insistieron en que “la gente está subiendo con el lodo y se les llena de barro toda la casa”, señaló.
Asimismo, reclamaron una postura humanitaria acorde. “Anoche empezó a llover y los niños decían va a venir de nuevo el agua y nos va a llevar las cosas… esos trastornos. ¿Por qué no vemos esa parte humanitaria? Es una situación de urgencia, es cada vez peor esto”, manifestaron las familias de la primera y segunda etapa de la barriada que hoy reclama sus derechos.
Diferencias inter-barriales y abandono municipal
Si algo le faltaba a esta postal de postergación y desigualdad, afirmaron que la segunda etapa está mejor que la uno. “Es porque la presidenta vive en la calle pavimentada, tiene gas, todas las necesidades. Cada vez que salimos solucionan los problemas de la etapa dos. Nosotros somos auto convocados porque estamos hartos, no nos representa como debe ser, como la presidenta del barrio”, revelaron.
A la espera de un representante de obras públicas de la Municipalidad, reclamaron que a pesar de haber comprado los terreno para hacer sus casas, los tienen “peor que en los asentamientos”. “No queremos algo de lujo, queremos soluciones”, señalaron. De hecho, aseguraron sentirse abandonados por la Municipalidad y el gobierno provincial.
“Si no fuera por nosotros que los vecinos nos juntamos para comprar ripio y desparramar ripio, los chicos no podrían ir a la escuela en épocas de clases porque se llenan de barro los pies. El transporte público no entra, ahora entra a cierta parte porque desparramamos ripio. Si en este momento necesitas que entre una ambulancia no pueden entrar porque está lleno de barrio, los servicios de transporte público menos”, analizaron.
Cansados de falsas promesas, adelantaron que permanecerán en el lugar hasta que alguien haga las cosas. En el video se registraron las diversas situaciones a las que debieron responder con los recursos que tenían a mano los mismos vecinos.
