SALTA (Redacción) – A una semana de la primera aplicación en la provincia y el país, en el Centro de Convenciones de Limache inoculó la vacuna SPUTNIK V a los trabajadores de la salud que se encuentra en la primera línea de atención en hospitales públicos y privados. De hecho, a la fecha cuentan 890 dosis aplicadas, según reveló la coordinadora general del Centro de Recuperación COVID-19, Carmen de la Serna.
La vacunación continúa con todo el personal de salud de primera línea, es decir, médicos, enfermeros, kinesiólogos, anestesiólogos, personal de limpieza de áreas rojas. Es decir, integra a todos aquellos que asisten a pacientes críticos en Terapia Intensiva, en el servicio de emergencias y en las salas COVID-19 de los nosocomios públicos y privados de Salta.
La logística
Paralelamente, la coordinadora De la Serna indicó que el Centro de Convenciones de Limache busca dar respuesta a la necesidad de la población articulando estrategias para los recursos con los que cuentan hoy. “Por un lado tenemos el sector de internación –con 140 camas- donde funcionan las salas COVID-19. Por otro lado, el vacunatorio para aplicar las dosis de la SPUTNIK V”, concluyó.
Para garantizar esta atención, el Centro de Recuperación COVID-19 cuenta con 10 islas de vacunación. A su vez, cada una está compuesta por 3 enfermeros y 1 inmunizador capacitados para la aplicación de la SPUTNIK V. Además, los puestos cuentan con elementos de primeros auxilios, equipos de protección personal y elementos descartables para complementar la aplicación histórica de la misma.
“Una vez que llega el trabajador de la salud, se identifica y se corrobora en el listado enviado por los hospitales y clínicas. Luego, se trae la vacuna –que se encuentra a 20 grados bajo cero-, a temperatura ambiente. En un lapso de entre 5 y 7 minutos, se descongela, se cargan las cinco dosis y se inocula a 5 personas en simultáneo”, dijo de la Serna.
Pocos pacientes con efectos adversos
Respecto a los efectos adversos de la inmunización contra la COVID-19, la Coordinadora General explicó que “muy pocos pacientes presentaron un leve dolor en el sitio donde se aplicó la vacuna, molestias al mover el brazo, febrícula, cefalea, mialgia y náuseas, de muy corta duración y que ceden con analgésicos”. Poniendo en valor a la vacuna, la consideró como “un arma que se nos da en esta lucha contra el coronavirus”.
La enfermera profesional, Ángela Duran, dijo que “la llegada de la vacuna a Salta ha sido emocionante. Desde el martes pasado que vengo aplicando dosis y siento mucha esperanza al saber que se cuenta con una herramienta que ayudará a salvar vidas; junto a mis colegas siento mucha emoción”. En sintonía con ello de la Serna, insistió en que “no evita la enfermedad, sino que mitiga su impacto sobre la salud previniendo cuadros graves”.
