SALTA (Redacción) – El caso de la muerte de Alejandro Benítez puso de manifiesto nuevamente la falta de reciprocidad por parte de Bolivia respecto a la atención médica. Es por eso que el gobierno del vecino país salió a defenderse y minimizó el hecho. La cónsul de Bolivia en Salta, Mónica Álvarez, se mostró en la misma sintonía pero le envió sus condolencias a la familia del profesor salteño.
La funcionaria del gobierno boliviano en Salta aseguró que, a pesar del testimonio de quienes acompañaban a Alejandro Benítez, el profesor si recibió atención médica. “El señor haría recibido antención por parte de un centro de segundo nivel”, aseguró la cónsul de Bolivia en nuestra provincia.
Tras asegurar que el caso está en investigación, algo que a la postre fue negado por altos miembros del gobierno de Bolivia, la cónsul aseguró que esperan una pronta resolución. “Somos países hermanos, tratamos de cuidar al hermandad y que se vayan resolviendo las cosas, es importante esperar la información”, manifestó.
Por último, la cónsul se refirió a la atención médica que reciben cientos de ciudadanos bolivianos en Salta, Jujuy y Buenos Aires. «Le agradecemos muchisimo al país», sentenció Mónica Álvarez que evitó referirse al pedido de dólares o pesos bolivianos que hicieron quienes manejaban la ambulancia en una práctica que ya se repitió en el pasado.
El pésame a la familia de Benítez
Mónica Álvarez también le envió sus condolencias a la familia de Alejandro Benítez, que debió juntar 1.500 dólares para repatriar el cuerpo del profesor salteño. “Nuestra solidaridad con la familia del hermano Alejandro Benítez, es una pérdida dolorosa. Nuestro sentido pésame”, sentenció la cónsul.
