Las dos hijas del histórico Juan Carlos Calabró tienen un rol diferente en lo que es el mundo de los medios de comunicación. Por un lado, Iliana se ocupa de la actuación, ha sabido formar parte del certamen conocido como el «Bailando por un sueño», ganó un «Cantando por un sueño», formato extinguido ahora de Showmatch, y muchas participaciones en obras de teatro. Marina se encuentra del otro lado del mostrador, como una de las periodistas más destacadas en el rubro de los espectáculos pese a no tener su lugar en programas que marcan agenda en ese aspecto.
En una entrevista radial, la expanelista de «Intrusos» contó que estuvo cerca de formar parte de una de las semanas de «Divina Comida», programa de Telefe. “Me llamaron muy sobre el pucho porque seguramente se les debe haber caído alguien (risas). Fue la semana que participaron Tamara Pettinato y Barbie Vélez. Yo soy muy mala anfitriona. No sé si tenía mucho para ofrecer y, además, de solo pensar en tener que recibir gente…», aseveró.
Posteriormente, la comunicadora manifestó si le era incómodo o no exponer su hogar. «No me molestaba mostrar la casa porque los planos son acotados Aparte uno puede decir ‘hasta acá’ y mostramos un poquito el living. Mi casa no es una mansión, es un departamento común así que por ese lado no me expondría a que digan ‘ah mirá esta como vive’. Para nada, es una casa como cualquier otra. Pero era ‘ay qué fastidio», indicó.
Las críticas de Marina Calabró a «Divina comida»
La integrante de «Lanata sin filtro», por Radio Mitre, dio más detalles de por qué no hubiera aceptado ser anfitriona. “El día que van a tu casa llegan a las 6 de la tarde y se van a las 3 y pico de la mañana. Y el día que uno va a otra casa tenés que llegar tipo 7 y también te vas a las 3 de la mañana, y yo hago radio a la mañana y ya arrancaba el colegio la nena. Era un quilombo la logística. Es una semana de disponer de todas las noches y madrugadas y yo dije ‘al otro día no voy a coordinar’. Así que no me cerraba por ningún lado”, afirmó.
Por último, Marina Calabró arrojó fuertes críticas sobre el programa: “Además lo que me pasa con Divina Comida es que al principio, no sé si era la novedad o todo estaba un poco más librado al azar, era algo amable, ameno, pero ahora le veo los hilos a todos, todo mal actuado en algunos casos, impostados. Es una buena idea, los números siguen acompañando y eso es inapelable», disparó.
