En las últimas semanas las empresas de telefonía comenzaron a anunciar y notificar a los usuarios que se volverá a incrementar el precio de los planes de los celulares. Sin embargo, señalaron que estos incrementos dependerán del servicio que cada cliente posee. Además, se debe remarcar que los «planes reducidos y complementarios» que se dictaron a raíz de la pandemia de Covid-19 seguirán vigentes y no sufrirán suba por el momento.
En primer lugar, se debe señalar que la firma Movistar anunció que «el plan Pospago más representativo tendrá una actualización promedio del 10% a partir de septiembre». Luego, describieron qué sucederá mientras tanto con los celulares bajo la modalidad Prepago. «Tras casi un año sin ajustes, en octubre finalizará la bonificación otorgada en noviembre de 2019 y extendida en marzo de este año», argumentaron desde la compañía.
En tanto, sobre los servicios de banda ancha, remarcaron que la adecuación será de un promedio del 9%. «El próximo mes además finalizará la bonificación de $104 otorgada en noviembre de 2019 para el abono de telefonía fija», agregaron. De igual manera, apuntaron que hay servicios que no tendrán adecuación y mantendrán sus valores actuales: «Como los Planes Inclusivos y Planes Reducidos; y otros en los que se bonificará por 3 meses la actualización, como las pymes con servicio de banda ancha cuyo tráfico disminuyó en un 70% o más».
Otra firma que anunció aumentos
Por su parte, la compañía Telecom informó a sus clientes un aumento promedio del 11% en todos los servicios móviles (prepago/pospago), fijos, TV Paga e internet fija. Cabe señalar que la empresa también consideró que «los precios de los servicios reducidos e inclusivos se mantienen sin modificaciones». Esta modalidad dictada por el Gobierno Nacional mediante el ENACOM comenzó el pasado mes de mayo y tenía como vencimiento el 31 de agosto, un plazo que se prorrogó.
Finalmente, mediante en un comunicado, explicó que la actualización: «es inferior al promedio de inflación del año en curso (13,6% enero-junio 2020 según Indec)». Y en esa línea, describieron que obedece al «aumento de los costos de mantenimiento de infraestructura y servicios». También argumentaron que se debe «al impacto de la devaluación del peso en una industria que tiene un alto porcentaje de sus insumos dolarizados».
