Ayer 1 de julio, Diana de Gales habría cumplido 58 años. Uno de sus hijos, el príncipe Guillermo quiso tener un detalle con los admiradores de su madre que siguen acudiendo año tras año a las puertas del palacio de Kensington para honrar su memoria con fotos y flores. El royal salió del apartamento del palacio, donde vive con su mujer y sus tres hijos para darles las gracias en persona.
Hoy el medio The Daily Mail, publicó las imágenes en las que se puede ver al duque de Cambridge, vestido de manera informal con unos chinos azul marino y una camisa de cuadros, charlando durante unos minutos con los participantes en la vigilia. “Guillermo me dijo que sabía que he estado viniendo aquí durante años y nos dio las gracias por lo que hemos estado haciendo por su madre. Ahora mismo estoy temblando. Estoy muy emocionado”, contaba al diario uno de los admiradores de la princesa Diana.
“Le dije que rezo por su madre cada domingo, y parece que eso le conmovió”, añadió. Otra de las habituales, dijo: “Estamos aquí para homenajear el legado de la princesa Diana. Han pasado dos generaciones desde su muerte y hay niños creciendo sin saber ni siquiera quién era. Es importante que se lo recordemos”.
Las personas que quieren recordar a Diana no tienen una tumba pública a dónde acudir para dejar flores, ya que la princesa está enterrada en una pequeña isla situada dentro de la casa de su hermano. Aun así, las verjas del palacio de Kensington, último hogar de la royal, siguen siendo el escenario de los homenajes a su legado.
Además, el príncipe Guillermo aprovechó la ocasión para confirmarles a los admiradores de su madre que podrán recordarla en la estatua que Ian Rank-Broadley está esculpiendo para conmemorar su muerte: “Estará lista pronto, muy pronto. Queremos asegurarnos de que quede bien. Es importante que quede bien”.
Recientemente el parque “The National Enquirer Live!” fue noticia por una gran polémica. Por 20 dólares, niños y adultos podrán montar en un simulador virtual en el que se recrea el accidente de coche que, el 31 de agosto de 1997, acabó con la vida de la princesa. Este es un parque temático dedicado a la línea editorial de mismo nombre, que explotó por años el nombre de Diana, con titulares como “Diana intentó matar a Carlos con una pistola”, “Las huellas dactilares revelan la identidad del asesino de Diana” o “Este es el verdadero padre del príncipe Harry”.
“Es una atracción en 3D, así ves los edificios de París y todo en tres dimensiones”, explicaba a la revista digital Daily Beast el empresario Robin Turner, uno de los principales inversores del lugar de diversión. “Muestra el camino que siguió Diana desde que dejó el hotel Ritz, con los paparazzi persiguiéndola y los fogonazos de flash que cegaron al conductor, y cómo sucedió todo”, concluyó.
