Tanto Kate Middleton como Meghan Markle están siempre en el foco de los medios. Al casarse con el príncipe Guillermo y el príncipe Harry respectivamente, ambas se volvieron unas de las celebridades más influyentes del mundo. No solo en el ámbito social, sino también en el de la moda, ya que cada vez que tienen un encuentro rodeado de cámaras, sus outfits y accesorios se destacan. Es por eso que las marcas se regocijan cada vez que una de las dos se decanta por una de sus creaciones.
En el caso de la duquesa de Sussex, cada vez que viaja lo hace con su valija de la marca Away. De hecho, le gustan tanto sus diseños que durante el baby shower que le celebraron en Nueva York, Markle le regaló una a cada uno de los selectos invitados. Parece un obsequio común, pero no lo es: las maletas cuentan con un localizador por GPS, un cargador portátil y una conexión de Bluetooth. Sin contar el gran diseño de aluminio que hicieron que se conviertan en furor entre los grandes influencers del mundo.
Con respecto al baby shower, el evento se llevó a cabo en el lujoso hotel The Mark en Nueva York y estuvo repleto de celebrities como Amal Clooney, Jessica Mulroney, entre otros. A pesar de que se conocieron algunas fotos, no trascendieron muchos detalles sobre esa noche. Hoy, seis meses después, es noticia un informe del Departamento de Estado norteamericano que se conoció gracias al medio Daily Mail. El documento contiene datos que afirman que la duquesa de Sussex huyó del hotel por una puerta lateral.
Al parecer, la exactriz no estuvo disfrutando tanto la fiesta como todos creían. De hecho, estuvo muy preocupada por la atención mediática que estaba recibiendo. Recordemos que en este momento era “nueva” en la familia real, por lo que tener un evento frente al foco de los medios no era lo recomendable. Según el informe, la duquesa le pidió a su equipo de seguridad salir por otra puerta que no sea la principal del hotel, con el objetivo de no ser fotografiada por lo fanáticos y paparazzis que la estaban esperando.
Está claro que el rol de los miembros de seguridad es tomar las acciones menos riesgosas para sus protegidos. Los acompañantes le explicaron a Meghan el riesgo de este cambio de salida, asegurándole que la puerta lateral del hotel no tenía barreras de seguridad y los periodistas se le podrían acercar más. Pero Markle no quería dar la impresión, al salir por la puerta principal, de que actuaba como una estrella más, aunque sabía que era inevitable por la cantidad de medios instalados para verla.
Para satisfacer las peticiones de la esposa del príncipe Harry, los autos que la esperaban tuvieron que moverse hasta una puerta lateral del hotel, dando algunas vueltas para despistar a los reporteros. Desde allí se dirigieron al restaurante The Polo Bar para cenar en compañía de Serena Williams y Amal Clooney. A pesar de que intentaron cambiar el trayecto, Meghan fue fotografiada entrando y saliendo del restaurante.
Otra de las medidas de seguridad tomadas la llevó a cabo la Oficina de Inteligencia y Análisis de Amenazas de Estados Unidos, que realizó una evaluación de los posibles ataques terroristas que pudiera sufrir la duquesa durante el viaje. Se determinó que el riesgo de que sufriera un atentado era bajo. Sin embargo, no descartaron la posibilidad de que pueda sufrir acoso por parte de una persona psicológicamente alterada, ya que es fácilmente reconocible. El Departamento de Estado no quiso declarar el costo que tuvo todo el operativo de seguridad.
