La renuncia de Meghan Markle y el príncipe Harry ha ejercido gran presión en la carga de trabajo que ha tenido que asumir Kate Middleton. La esposa del príncipe William se ha visto obligada a aumentar su tiempo de trabajo como representante de la familia real ahora que Markle y Harry han renunciado a sus deberes para buscar su independencia económica lejos de la monarquía.
En una nueva publicación de la revista Tatler, los expertos afirmaron que la duquesa de Cambridge está empezando a ceder bajo la carga de trabajo. «Kate entiende que el único credo de la familia real es el deber, el deber, el deber», dijo una fuente cercana. «Mientras que con los Sussexes es una incertidumbre constante, los Cambridges representan estabilidad y continuidad».
¿La duquesa esta furiosa?
Otra fuente agregó: “Kate está furiosa por la carga de trabajo que ha tenido que asumir. Por supuesto, ella siempre está sonriendo y vistiéndose apropiadamente, pero no quiere esto. Ella se siente exhausta y atrapada. Está trabajando tan duro como el CEO de una compañía pero sin los beneficios y las vacaciones».
El medio reseñó que la familia real se vio empañada no solo por la renuncia de los Sussex, sino también por otros escándalos notables, Middleton asumió más compromisos públicos para que la familia pudiera salvar la cara a raíz de la atención negativa que había tenido ante la prensa. Según los informes, asumió 11 compromisos reales en un mes, tres de los cuales fueron en el espacio de solo un día.
La disputa inicial
Aunque la decisión de Meghan Markle y el príncipe Harry obligó a Kate Middleton a asumir más trabajo, los expertos afirman que la fricción entre Middleton y Markle se remonta mucho más allá del anuncio hecho en enero. «No creo que haya jalado a Meghan bajo su ala y le haya dicho: ‘Te mostraré cómo son las cosas'», dijo un fuenta a Tatler. “Catherine y William fueron muy circunspectos desde el principio con respecto a Meghan, lo que lastimó e indignó a Harry».