Ha sido un año de cambio y transformación para Meghan Markle y el príncipe Harry. En enero, la pareja anunció su decisión de dimitir como miembros de alto rango de la familia real, y finalmente se mudaron a Santa Bárbara, California, con su hijo Archie, quien ahora tiene 1 año. Meghan Markle y el príncipe Harry compró su casa en el barrio de Montecito durante la pandemia.
«Están comenzando a explorar su vecindario», dijo la experta en temas de la realeza Katie Nicholl. «Se han aventurado a salir y los han descubierto», agregó. Aunque la pareja está explorando su nuevo lugar, desean proteger la privacidad de su familia. «Mantienen un perfil bajo. Son muy conscientes de los paparazzi», agregó Nicholl.
En su nuevo lugar
«Están decididos a no ser fotografiados y, en particular, a proteger a Archie de los paparazzi, así que no esperen verlos en las playas cercanas», agregó. Uno de los pasatiempos favoritos de la pareja es visitar una querida cadena de comida rápida. «A menudo se detienen en In-N-Out Burger para asombro del personal que los atiende», reveló Nicholl.
«Cualquiera que conozca al príncipe Harry sabe que le encanta una buena hamburguesa. Es un fanático de la comida rápida, así que no me sorprende en absoluto que se detenga allí», agregó. Aunque la pareja originalmente afirmó querer dividir su tiempo entre América del Norte y el Reino Unido, la pandemia de coronavirus les ha impedido viajar de regreso a Inglaterra.
Unión familiar
«Volverán al Reino Unido, por supuesto, querrán ver a la familia de Harry», dijo Nicholl. «Puedo verlos regresar y pasar parte de las vacaciones de verano posiblemente alternando Navidad, pero no creo que vayan a dividir su tiempo. Creo que han hecho su nueva vida en Estados Unidos y ahí es donde van a pasar la mayor parte de su tiempo a partir de ahora».
