En el último fin de semana, el preparador físico Miguel Ángel Paz quedó en boca de todos por su irresponsabilidad de no cumplir con la cuarentena obligatoria establecida por el Gobierno nacional para evitar posibles casos de Coronavirus, y además golpear a un guardia de seguridad que le ordenó regresar a su establecimiento. Este hecho indignó tanto al Presidente de la Nación, Alberto Fernández, como también a varios famosos que repudiaron su accionar en las redes sociales.
En el día de hoy, el profesor de educación física se filmó en lo que fue su video con pedido de disculpas incluído por todo lo que le hizo al guardia de seguridad. “Hola, soy Miguel Paz, me conocieron tristemente por la agresión a una persona. Quería pedir disculpas públicas, en primer lugar a Gustavo por haberlo agredido. No se merecía esa agresión. De corazón te pido disculpas y espero que puedas perdonarme», suplicó.
Posteriormente, el personal trainer extendió su perdón hacia todo el país. «A toda la sociedad, a todos los argentinos y a los que vieron el video, sepan que estoy muy arrepentido. Fui un cobarde. A las autoridades y al Presidente por tomarse el tiempo de tomar cartas en el asunto. No tomé real dimensión de las medidas de prevención. A mi familia y amigos, vecinos, por esta situación que les estoy haciendo pasar. Estoy arrepentido», selló.
El testimonio de Miguel Ángel Paz en el juzgado
El portal «Teleshow» pudo acceder a lo que fueron las declaraciones del profesor sin estar bajo juramento. “Fue una mala reacción”, dijo sobre su golpiza bestial al vigilador. Además, Paz admitió que volvió de un viaje de Estados Unidos y que no cumplió con el aislamiento. Argumentó que tuvo un problema familiar con su padre y que no tenía noción de los alcances del DNU porque “era muy reciente”. “Mi papá está con una afección y mi mamá me pidió que fuera a ayudarla”, relató.
Esto fue otro de los dichos de Miguel Ángel en su indagatoria. “Cuando volví de viaje había mucha paranoia en el edificio. Sentí que mi familia estaba asediada por los vecinos. Me entero que el vigilador le había hecho saber al resto de los vecinos que me iba a denunciar. Me enojó esa situación. Lo llamé por teléfono y le pedí que no lo hiciera, que no me denuncie. Se lo pedí bien pero como noté que no me daba pelota decidí bajar para explicarle los puntos (sic)”, afirmó quien está bajo arresto domiciliario, investigado por lesiones y amenazas. .