Marcelo Tinelli es el hombre al cual la prensa tiene en el ojo de la tormenta. Todo inició con su viaje a Esquel a muy pocas horas de que el presidente Alberto Fernández anuncie la presente cuarentena obligatoria. Luego y de forma más reciente, el periodista recibió a modo de vuelo «humanitario» y «sanitario» una valija con medicamentos que no pudo conseguir en la ciudad chubutense. Esto fue otra polémica de la cual muchos hacen mención. En este sentido, su hija Cande recibió una incómoda pregunta al respecto.
Recordemos que quien nació producto del primer matrimonio que el «Cabezón» llevó a cabo con Soledad Aquino se encuentra en estos momentos dentro de la casa que se ubica en la ciudad chubutense. En el contacto con las redes sociales, la modista se encargó de proponer un juego fácil de adivinar en la que mostró la imagen de un elefante y retó a si una persona acertaba qué animal era, ella iba a ingerir vino. Como en buena parte los medicamentos no tienen efecto tomando alcohol, un usuario se animo a discutirla por privado.
“Ojo que la medicación y el alcohol te pueden hacer mal. ¿O iba otra cosa en la valija?, le dijeron en el chat de Instagram. Sin escapar a la pregunta, Candelaria aplicó sarcasmo en su primera contestación. «había caviar» dijo y posteriormente agregó: «Gracias a Dios no hay contraindicaciones en tomar las medicaciones que tomo y beber alcohol. ¡Qué amor igual! ¡Gracias por preocuparte! El misterio de la javali”.
Los dichos de Cande Tinelli defendiendo a su papá
Anteayer, la segunda de las hijas del comunicador se encargó de emitir un reciente descargo en sus historias de Instagram. “Solo voy a decir esto: No tengo por qué hablar de mi intimidad, ni darle explicaciones a nadie. Así que no esperen que me enoje y salte, porque estoy muy tranquila. Faltan muchos días aún de ‘encierro’… Acá se nos ve la hilacha a todos. Es lógico, de golpe nos encontramos con nosotros mismos y colapsamos”, lanzó.
Por último, la joven influencer Cande Tinelli añadió: “Solo quiero mandarles mucho amor, que lo pongan en práctica, el mundo nos está queriendo decir algo. Aprendamos de esto, aprovechemos para sanar, no para seguir haciendo lo mismo de siempre. Dejen de pensar en el qué dirán, dejen de preocuparse TANTO por lo que dice o hace el otro. Hay gente muriéndose, mucha. Reflexionemos”, sentenció.