SALTA (Redacción) – El paso del tiempo no borra las heridas y muchos menos los cabos sueltos. Al contrario, la duda y la incertidumbre crecen y se tornan desesperantes al tiempo que se convierten en el motivo para levantarse cada día y saber qué pasó. Es el caso del hallazgo de los cuerpos de Yanina y Luján, quienes supuestamente habrían procedido a “suicidarse”. Sin embargo, la familia Peñalva considera que a las chicas las mataron.
En una entrevista brindada a FM Profesional 89.9, el padre de Luján, Gustavo Peñalva, indicó que durante este tiempo se elevaron 25 oficios con solicitudes a la jueza de la Sala VI del Tribunal de Juicio Mónica Mudski. Entre estos pedidos, figura el envío de la ropa, cartera de Luján y la cuerda para que se les practique estudios de laboratorio en Estados Unidos.
Según Peñalva, en EE.UU poseen una máquina especial que extrae ADN de superficies rugosas y porosas, y esperan con este procedimiento poder obtener más pruebas. Sin embargo, todo se ha vuelto difícil para la familia ya que tras cada paso hay una piedra en el camino. Precisamente, ahora el problema radica en cómo se haría el envío al norte del continente. Desde la Justicia le advirtieron a Peñalva que no poseen recursos económicos para solventar los gastos del envío.
Los avances en la causa
En este sentido, el padre de la niña manifestó que finalmente fueron entregados los pedidos de informes de telefonía celular. En ellos se registra el recorrido de antenas y a la cobertura de antenas de telefonía celular en la zona donde se movilizaron las jóvenes y fueron hallados sus cuerpos. Los informes se sumarán al análisis integral de telefonía de la causa. Además, se espera que aporten mayores precisiones, dados los avances tecnológicos disponibles en las empresas proveedoras de servicios telefónicos.
Cabe recordar que la intervención de los fiscales penales se produce en el marco de la investigación llevada a cabo por la jueza Mudski. La misma era responsable de la dirección en la causa originaria del ex Juzgado de Instrucción Formal 3, caratulada “muerte dudosa en perjuicio de Yanina Nüesch y María Luján Peñalva”. Esta causa se investiga de acuerdo al anterior Código Procesal Penal, que otorgaba facultades a jueces y juezas para dirigir las investigaciones.
Sobre el caso
Peñalva, de 19 años, y Nüesh, de 16 años, eran amigas. En julio del 2012, las encontraron colgadas con una misma soga de un árbol, en un campo de la zona sur de la ciudad. El mismo era vecino al barrio San Carlos, cruzando un canal bastante profundo. Habían desaparecido dos días antes. La causa judicial fue caratulada en principio como «muerte dudosa».
Finalemnte, fue cerrada en 2014 por el juez de instrucción Pablo Arancibia. El mismo la consideró «consecuencia de una decisión personal, libre y voluntaria de cada una», es decir, que las chicas se habían suicidado. La causa se reabrió con la carátula inicial recién el 7 de febrero de 2018.
