SALTA (Redacción) – El debate por el Impuesto a las Grandes Fortunas sigue causando polémica en el sector político argentino. Ante la posibilidad de que el proyecto se apruebe, se realizaron varias investigaciones para saber qué funcionarios pagarían más. En base a las declaraciones juradas, entre los políticos que más dinero pagarían se encuentra un legislador salteño.
De acuerdo a investigaciones realizadas por medios nacionales, el senador salteño y exgobernador de Salta, Juan Carlos Romero, se encuentre entre los 10 funcionarios con más patrimonio en su poder. Por este motivo, en caso de aprobarse el Impuesto a la Grandes Fortunas, tendría que pagar aproximadamente 4.000.000 de pesos. El patrimonio declarado por el exmandatario provincial es de $214.400.554,61 y una parte se encuentra fuera de Argentina.
El hecho de tener una parte de su fortuna fuera del país podría complicar aún más a Romero, ya que el impuesto prevé un recargo por esto. No obstante, en el proyecto aclararon que el recargo no se cobrará si la persona trae al país en un plazo de 60 días después de aprobada la ley las «tenencias en moneda extranjera en el exterior y los importes generados como resultado de la realización de activos financieros fuera del país que representen como mínimo el 30% del valor total de esos activos”.
Un tenso debate
El tratamiento de este proyecto se da en un marco de gran tensión entre el bloque oficialista y la oposición. Máximo Kirchner pidió una sesión especial el próximo martes para tratar el Aporte Solidario Extraordinario, también conocido como Impuestos a las Grandes Fortunas. Sin embargo, Juntos por el Cambio ya adelantó su posición en contra de este polémico proyecto de ley.
A pesar de no contar con el apoyo de la oposición, el Frente de Todos confía en tener los votos necesarios para aprobar esta ley. «Creemos que el número mágico de 129 votos se logrará superar», explicó el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda y uno de los autores del proyecto, Carlos Heller. Cabe recalcar que con este proyecto, el Gobierno espera recaudar unos $300.000 millones.
