SALTA (Redacción) – En el marco de la nueva normalidad anunciada por el gobernador de Salta, a la par de una fuerte flexibilización, lo que empezó a predominar fue la cantidad de vehículos circulando por la capital salteña. Por el momento no hay un control respecto a si se cuenta con los papeles de los vehículos, alcoholemia o estacionamientos en lugares permitidos o no. Es decir, no se hacen multas de tránsito desde ya varias semanas.
Esta situación se debe a que desde que inició la cuarentena por Coronavirus, la Secretaría de Movilidad Ciudadana destinó a los inspectores de tránsito a realizar tareas específicas de acompañamiento dentro de los operativos en hospitales, clínicas y demás. En cuanto a la actividad barrial, la profesión se vio limitada a los patrullajes de rutina. En diálogo con Salta4400, Gilberto Pereyra, Secretario de Movilidad Ciudadana de la Municipalidad de Salta, anticipó que la próxima semana reabrirían las puertas de la Secretaría, según lo que digan desde Nación.
En ese sentido, esperan retomar las actividades en las oficinas de la calle Santa Fe, tanto como en la sede ubicada en el predio del Hiper Libertad. Con un protocolo bajo la manga, desde la Secretaría se encuentran tramitando la obtención de licencias. “Estamos pidiendo protocolos a los médicos que atienden, para dar certificados a los que están tratando de obtener licencias. Luego, le enviamos a la intendenta para que ella informe a Nación la factibilidad del pedido de apertura para empezar a atender por lo menos en lo que respecta a renovación”, explicó Pereyra.
La fuerza policial a disposición de la Salud
Lo cierto es que la cuarentena no le dio margen a la Secretaria tampoco. Por ende, no se registraron multas durante esa instancia. Gilberto reveló que desde un primer momento apoyaron todas las medidas preventivas que se llevarían a cabo en las diferentes instituciones provinciales. Asimismo, apoyaron los controles policiales, poniendo a disposición los inspectores necesarios en cada puesto.
Aproximadamente, 70 a 75 efectivos estuvieron en actividad durante la cuarentena trabajando de forma permanente, de un total de 190 en la calle. “También había más inspectores trabajando en el área administrativa en los depósitos, y otras 33 personas factor de riesgo que están desde sus casas”, aseguró. En este sentido, la actividad policial se remitió al ordenamiento de la ciudad en relación a las necesidades sanitarias.
“Siempre fue relacionado fundamentalmente a la necesidad de seguir creando un ambiente adecuado, en situaciones de emergencia. Por ejemplo, trabajamos en señalizar y liberar totalmente el pasaje que está en el hospital Materno infantil que une Sarmiento con Alvear, que exclusivamente es para que pase la ambulancia de emergencia”, analizó.
Además, el secretario agregó que se trabajó en el hospital Oñativia, donde se cambio la dirección de la calle. Para ello, se puso cartelería y se pintó frente del hospital. Simultáneamente, se pintaron rayas de distanciamiento social en diferentes instituciones como bancos, correos y otros espacios de gran afluencia pública.
¿Nueva o vieja normalidad?
Día a día, con la flexibilización de por medio, la “nueva normalidad” empieza a ganar lugar. Las postales diarias dan cuenta de una mayor circulación vial y por ende, muchos más conductores implicados en el tráfico diario. “En general los vehículos en Salta casi todos están en las calles, hay muchos vehículos, muchas motos. La diferencia está en el distanciamiento que tenemos que tener, el uso del barbijo y la necesidad de ser solidarios en la prevención y conducción”, profundizó.
Sin embargo, hay un contraste entre lo que dice la norma y lo que dicen los hechos; una marcada diferencia que es parte de la idiosincrasia salteña. Gilberto lo entiende como un “problema cultural”. “No respetamos, los conductores de autos nos enojamos con el ciclista y el ciclista con el del auto y así todo; nos falta a todos respetar las normas y tener un poco más de miradas sobre el interés del otro”, subrayó.
Denuncias y siniestros intermitentes, multas ausentes
A mayor movimiento, mayor porcentaje de siniestros viales. Esta es la fórmula básica para entender lo que empieza a suceder nuevamente en las calles de Salta. Por su parte, Gilberto explicó que no hay registros de siniestralidad en estos momentos, al menos no de manera oficial. De hecho, de esta tarea se encarga la oficina de la Policía de la Provincia.
Respecto a las denuncias, hay muestras claras de que la actividad se ha incrementado. “Nosotros vemos mayor cantidad de personas que se llegan a hacer la denuncia, se atienden por turnos. Ponemos sillas para que estén sentados a una distancia de dos metros como mínimo. Todas las medidas de prevención previstas”, aseveró.
Si bien, se trabaja activamente para que en calles donde hay clínicas, la calzada esté liberada, no se están haciendo multas en lo que es micro y macro centro por estacionamiento en lugares no permitidos. “Nos dimos cuenta que cuando dejamos de controlar, había autos que ponían en sectores de ambulancias. Así que trabajamos sobre eso y nos mantendremos en esa postura porque si hay situaciones de emergencia, la ambulancia tiene que poder moverse y llegar rápidamente”, concluyó.
