SALTA (Redacción) – Llegó diciembre, un mes particular para los argentinos y argentinas. Las fiestas, Papa Noel, Navidad, reuniones familiares y también medidas económicas para evitar cualquier malestar por parte de la sociedad. Desde Casa Rosada dejaron trascender que el presidente Alberto Fernández tiene decidido otorgar beneficios económicos a diferentes sectores de la sociedad.
Algunas de las medidas económicas que se han dejado entrever por parte del oficialismo son bonos, exención del pago de ganancias en los aguinaldos e incorporar una canasta navideña dentro de los precios cuidados. Todo esto tiene como objetivo asegurar la paz social y fomentar el consumo, inyectando dinero en la economía real y en el bolsillo de los argentinos pero especialmente de los más desprotegidos.
Por ejemplo, aseguraron que «“en diciembre, los jubilados van a cobrar un 12,11% del aumento trimestral«. Pero también se está pensando, entre las medidas económicas posible, en un bono para los beneficiarios de los planes sociales, reabrir las paritarias en el sector privado y no cobrar impuestos a la ganancia sobre el aguinaldo. La gran incógnita es qué respaldo financiero tiene el Estado nacional para financiar estos gastos.
La titular de la ANSES, Fernanda Raverta, había detallado el viernes que se «está evaluando un bono de fin de año para jubilados y jubiladas”. Mientras que había ratificado «en diciembre, los jubilados van a cobrar un 12,11% del aumento trimestral», contrariando a lo dicho por la vocera presidencial, en ese mismo día, Gabriela Cerruti que había aclarado que no era posible ningún bono.
Por otro lado, desde el Ministerio de Desarrollo Social se había adelantado que los beneficiarios del Potenciar Trabajo, al rededor de 1,1 millones de personas, se les otorgaría un bono de $8.000, es decir, la mitad de lo que paga mensualmente en este programa. Mientras que desde el Ministerio de Producción habían anticipado la canasta navideña dentro de los precios cuidados y cambiar la escala del impuesto a las ganancias. Todo con el objetivo no afectar al bolsillo de la clase media y los sectores populares.
